Alejandro Delgado | LA PRENSA.- También al este de la ciudad, un grupo molesto, enardecido y furioso de habitantes de la parroquia Santa Rosa, específicamente los sectores de El Ujano 1 y 2, San Valentín, Las Margaritas, San Bernardo, Los Libertadores y José Gregorio Bastidas se apostaron en la sede de Corpolara exigiendo el código de registro de los CLAP, ya que nunca han recibido el beneficio de las bolsas de comida.
Los afectados denunciaron que son considerados como zonas de silencio y por esta razón pasan hambre a diario. “Necesitamos que nos registren inmediatamente porque ya tenemos todos los requisitos listos, la comida la mandan, pero la desvían hacia otros lados. Necesitamos que nos tomen en cuenta”, aseguró Aura Piña de Leal, quien se desempeña como coordinadora de la UBCh José Gregorio Bastidas.
Una fuente que pidió no ser identificada explicó que los dos objetivos de la protesta fueron la entrega inmediata del código, debido a que la comunidad se encuentra organizada como de los CLAP desde hace mucho tiempo, y denunciar a los que poseen credenciales y tomaron las responsabilidades de los CLAP, utilizaron sellos de los
Consejos Comunales y han manipulado convenios que se han hecho con los mercados, desviando hacia otros destinos las bolsas de alimentos correspondientes a las zonas de silencio.
Además, voceros comunales de la UBCh José Gregorio Bastidas alegaron que las personas que desvían las bolsas de comida de la zona de silencio de las comunidades antes mencionadas son Ernesto Sánchez, a quien identificaron como coordinador de los CLAP, y Juan Campos, un funcionario de la Sundde. «Depongan esa actitud, porque no le están haciendo el bien a la comunidad”, concluyó una de las afectadas de estas comunidades, que pidió no ser identificada.
De no obtener respuestas seguirán tomando las calles y la sede de Corpolara ya que consideran que deben ser tomados en cuenta como las demás comunidades.