María B. Jordán | LA PRENSA DE LARA.- Aprovecharon la soledad del Decanato de Ciencias Económicas y Empresariales de la UCLA, ubicada en la calle 8 entre carreras 22 y 23, para ingresar y dañar vidrios, forcejear ventanas y puertas. De acuerdo a los estudiantes, las personas que ingresaron no se llevaron ningún objeto de valor.
En esta oportunidad, el área de Registro Académico fue el blanco de esas personas que ingresaron, lo que hicieron fue romper los vidrios, abrieron las puertas y a pesar que ingresaron sólo causaron destrozos y dejaron las gavetas abiertas.
De acuerdo a Jesús Suárez, presidente de la Federación de Centros de Estudiantes de la UCLA (FCU-UCLA), no reportaron que se hayan llevado algún equipo. «Suponemos que fue el primer intento para revisar qué había y luego volver».
El dirigente estudiantil dijo que ellos se acercaron hasta el DCEE y lograron resguardar las cosas para evitar que en una nueva oportunidad ingresen a llevarse las computadoras y cualquier otro equipo de valor que esté en el área de Registro Académico.
José Monasterios, consejero de la FCU-UCLA, dijo que esa área se encarga de la inscripción de los estudiantes, otorgar constancias de estudios, notas certificadas y cualquier otro documento que necesiten «y es un área que estamos utilizando más para poder ejecutar las clases, parece un ataque premeditado».
Los estudiantes de la UCLA rechazan ese nuevo ataque sucedido la madrugada del pasado jueves, porque afecta la continuidad de las clases así sean a distancia y generan pérdidas irreparables. El último hurto que se registró en el DCEE fue a principios de año, cuando los dueños de lo ajeno ingresaron y se llevaron computadoras y otros equipos que habían sido donados por empresas privadas.
La semana pasada también ocurrió un intento de hurto en la Unexpo, donde seis personas ingresaron a la biblioteca y ya tenían partes de aires acondicionados listas para llevárselas, afortunadamente uno de los vigilantes se dio cuenta mientras hacía una ronda y solicitó apoyo, y lograron frustrar el hurto.
Ante la falta de vigilantes, los hampones se aprovechan para llevarse lo poco que queda en las universidades.
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