Cauchos, bolsas de basura y escombros son algunos de los elementos que los conductores encuentran, sobre todo en altas horas de la noche o madrugada en la avenida Hermano Nectario María, conocida como la Ribereña, y que los atemorizan porque son colocados para cometer robos.
Motorizados y conductores de carros han denunciado, a través de grupos de WhatsApp, la presencia de estos obstáculos que les dificultan la visibilidad y que podría tratarse de un modus operandi. El mes pasado, un joven aseguró que cuando iba manejando su moto por la avenida Ribereña con avenida Uruguay se percató de unos escombros en la vía y tuvo que reducir la velocidad, y fue allí cuando, supuestamente, unos hombres a bordo de una moto intentaron robarlo.
“Ellos se acercaron y de inmediato aceleré, me persiguieron por unos minutos, pero como estaba el puesto policial se desviaron. Me querían robar”, comentó el joven que estaba en la zona dejando a un cliente.
Luego del hecho, el motorizado de inmediato avisó a los funcionarios y aunque hicieron un recorrido por la zona, no dieron con los presuntos delincuentes.
Un grupo de conductores de motos indicó que con los cuentos que han escuchado por la zona prefieren no circular en la noche y tratan de no hacer “carreritas” por ese sector.
El temor se ha apoderado de los motorizados y conductores de autos, hasta el punto de solicitar más presencia policial en la noche. Además, señalaron que estos escombros pueden ocasionar accidentes si alguien no logra esquivarlos a tiempo.
La Ribereña supone un peligro para los conductores.
Una fuente policial indicó que han recibido denuncias anónimas sobre este tipo de incidentes en la avenida Ribereña, pero hasta ahora no han logrado atrapar a delincuentes.
“Cuando voy manejando por la avenida casi a las 7:00 de la mañana se observan muchos obstáculos, más que todo cajas y algunas veces hasta basura. A veces están en el medio de la vía, no sé si se trate de un modus para robar, pero sí hay que estar alertas”, comentó Sonia Morales, habitante de Cabudare.
Según reportes policiales, los robos y hurtos de motos han estado presentes desde el año pasado. Las parroquias Unión y Guerrera Ana Soto del municipio Iribarren son las que más han registrado este delito que tiene en alerta a conductores.