Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- La falta de mantenimiento y los más de 100 años de historia que tiene la casa cultural de Curarigua, capital de la parroquia Antonio Díaz de Torres, hicieron que sus paredes y techo se desplomaran hace dos años en plena pandemia, y desde entonces el lugar permanece cerrado.
Lo que más le preocupa a Bernardo Yépez, cronista de esta comunidad, es que allí funcionaba una biblioteca pública que contiene más de 6.000 ejemplares de textos escolares e historia.
«El inmueble fue adquirido por la sociedad civil Amigos de Curarigua. Está ubicada frente a la plaza Bolívar de Curarigua, y aunque hemos ido a hablar con el alcalde, Javier Oropeza, él nos ha dicho que para este año ya el presupuesto municipal está comprometido en otras obras. Hacemos un llamado al gobernador, Adolfo Pereira y al sector privado a que ayuden a levantar la casa cultural», exhortó.