Jesús Alí Oviedo | LA PRENSA.- Ni el frío de las madrugadas, el sol ni el calor del asfalto, le derrite las esperanzas de tener un día productivo a las cafeceras de la autopista Lara-Zulia. Pero lo que sí les pega duro sobretodo al bolsillo es el incrementos de los insumos y la inseguridad lo que ha afectado en las ventas en los últimos ocho meses y por ende llevan menos ingresos a sus hogares.
Yaneth Chaviel, de 27 años, contó que lleva siete años vendiendo cafecitos en Morroco del municipio Torres, usa una gorra y suéter y le sonríe a todos los conductores que se trasladan por la carretera pero detrás de su rostro está la preocupación que tiene por garantizar el sustento diario a sus dos bebés.
La vendedora detalla que en 2016 vendía entre seis y siete termos diarios pero ahora no pasa de cuatro.
Detalla que el alto índice de inflación del país le ha afectado porque compra el kilo de azúcar en 16 mil bolívares y 200 gramos de café en Bs. 6 mil lo que le baja el nivel de ganancias, sin embargo se las ingenian en ofrecerlos de diferentes tamaños para que resulten accesible al bolsillo de los conductores. El café pequeño lo cobran entre 500 y 600 bolívares.
“Las ventas están malísimas”, dice con lamento Ydania Villanueva, cafecera desde hace 4 años en el sector La Sabana. Señala que este bajón se debe a que los camioneros no se detienen en la vía por temor a ser emboscados por delincuentes.
Aunque ser cafecera es un trabajo riesgoso porque se exponen a los peligros de la carreteras y a las faltas de respeto por parte de algunos camioneros, aún se mantienen en el oficio con el que han levantado sus hogares.
“Aquí uno pasa muchos sustos porque la mayoría de los carros pasan a millón y no le paran a los policías acostados. Si uno no se quita la atropellan”, relata Carmen Alvarado, quien tiene más de 8 años trabajando en el sector Puricaure.
Chaviel señala que no sólo hay riesgo de ser atropellada, apuntó que en una ocasión un conductor le pegó en sus glúteos y que otros se ponen “payasos” porque creen que su trabajo se basa en entretenerlo.
“Yo supero esos percances y sigo adelante”, expresó.