José Miguel Najul | LA PRENSA.- Tanto la Gobernación de Lara como las alcaldías que están en manos de dirigentes políticos opositores señalan que este es un nuevo golpe a los recursos, que ya de por sí estaban en una condición severamente deficitaria, en función de las necesidades de funcionamiento, pero también de inversión.
Erick Valles, secretario general de Gobierno de Lara, apunta que con este nuevo incremento salarial el presupuesto de la región para el 2016 tiene un déficit de 15 mil millones de bolívares aproximadamente.
“Estamos revisando el impacto concreto en cada una de nuestras partidas y dependencias. Pero queda claro que debe venir un recurso de Caracas (proveniente del Gobierno nacional) porque, de lo contrario, no podremos terminar el año”, advierte Valles.
En la Alcaldía de Iribarren el golpe es menor, pero aún así las cuentas se descuadran. Los últimos créditos enviados por el Estado venezolano para la capital larense sumaron un total de 300 millones.
Alfredo Ramos decidió aportar más de 600, provenientes de la recaudación fiscal, que es el pulmón propio de la institución, y trascendió que no descartan que ésta tenga que ser la opción a la que recurran las autoridades para pagar a los más de 5 mil trabajadores activos y mil 200 jubilados, a pesar de que el Gobierno nacional nunca se dispone a reembolsarlas.
Palavecino es una de las jurisdicciones en las que el escenario es verdaderamente crítico. Manuel Cols, director general de la alcaldía, recuerda que el último balance de déficit rondaba los 400 millones de bolívares para unos 300 empleados.
“Nuestros recursos propios son modestos, y no tenemos la capacidad de generar la cobertura a través de la recaudación fiscal. A pesar de eso, el alcalde José Barreras se ha dedicado siempre a honrar los compromisos de la convención colectiva estrictamente”, expresa Cols.
Desde estas instancias consideran que, en esta ocasión, se vuelve imperativo que el Gobierno nacional, que ejecutó un nuevo “aumento inconsulto” mande los recursos necesarios para cancelar los pasivos laborales que genera.