Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- «Ha sido absurda e irracional la decisión que tomó la dirección nacional de G4 de inscribir candidatos en Lara el día sábado 25 de septiembre al estilo de Tibisay Lucena, a las 3:30 de la madrugada. Exijo una explicación porque me excluyen cuando en su momento fui el único candidato que estuvo de acuerdo con las primarias, las encuestas y el consenso para elegir una fórmula unitaria».
Con esas palabras, Alfonso Marquina, dirigente nacional de Primero Justicia, rechazó la designación de Luis Florido como candidato de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), a la Gobernación de Lara, igualmente la designación de Sobella Mejías como candidata a la Alcaldía de Iribarren, cargo al que aspiraba.
Marquina sostiene que la decisión no fue consultada con Primero Justicia regional, por lo que exige una explicación, porque a su criterio se violaron los acuerdos al momento de participar en unas elecciones. «Vengo a pedir respeto a Lara y a Barquisimeto, le exijo a la directiva del G4 cuál fue el criterio que privó, había un acuerdo integral, pero esta decisión me suena a reparto de barajitas. Se nos impone un candidato a dedo que no aceptó primarias ni consenso en su momento, se me desconoce y excluye de la fórmula unitaria. Yo no soy divisionista, pero están imponiendo la división con esta absurda candidatura», reiteró.
Indicó que le ofrecieron ser candidato a la Alcaldía de Palavecino como «un premio de consolación» que rechazó. «Hay quienes estarán diciendo, Marquina ahora es un alacrán. No soy un alacrán, la unidad no debe ser un chantaje. Estas elecciones no son una fiesta electoral, son elecciones para marcar un rumbo en enero que nos permita prepararnos para la salida de Nicolás Maduro», exclamó.
A su criterio, con esta decisión se está incentivando la abstención para el 21 de noviembre. «Si alguien debe estar celebrando esta decisión, este atropello en Lara, y también cometido en el estado Miranda, son quienes están usurpando funciones: el régimen», comentó.
Asegura que aún hay tiempo de rectificar la decisión, aunque ya el nombre del candidato no aparezca en la boleta electoral por haberse vencido el plazo en el cronograma electoral.