Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- Desesperadas están 500 familias ganaderas en 14 caseríos ubicados en el eje Duaca- Moroturo de Lara, tras contabilizar 15 días sin electricidad. Alcifredo Reyes, director la Asociación de Ganaderos de Urdaneta, explicó que aunque han denunciado en la sede de Corpoelec del municipio, la respuesta que les han dado es que los vehículos que se utilizan para atender las emergencias en las comunidades no pueden trasladarse hacia las zonas porque no tienen combustible.
«Se nos está perdiendo la leche en los potreros y ya no tenemos capacidad para refrigerar el queso que fabricamos. Cerca de 500 pequeñas y medianas fincas productoras se ven afectadas, porque tampoco pueden utilizar las plantas eléctricas debido a la escasez de gasoil y gasolina», resaltó.
Hay fincas que tienen ordeñadoras mecánicas, o que incluso para hacer la limpieza diaria en las unidades de producción dependen de motobombas de agua. Los apagones comenzaron a intensificarse hace dos meses, cuando de ser de cuatro horas diarias, a 48 horas y cada vez más frecuentes.
Las comunidades afectadas son: Caño Rico, Cambural, Arire, El Palmar de Cucharito, Agua Blanca, Rancho Verde, Los Pozones, El Tesoro, Guasgualina, Totoremo y Caño Negro. Reyes comunicó que ayer 2 de julio debido a las denuncias del gremio agropecuario se trasladó hasta la sede de Corpoelec en Barquisimeto, con la intención de reunirse con el gerente regional, pero sólo le recibieron una carta donde explicaba el problema, con la promesa que sería leída y atenderían la problemática.
«Hay una inestabilidad del sistema eléctrico debido a que el Estado nunca ha invertido en el servicio en Crespo ni en Urdaneta. Postes, líneas de transmisión eléctrica, transformadores están muy deteriorados y hay sobrecarga de energía por la demanda eléctrica que tienen las fincas y porque las familias deben cocinar con cocinas eléctricas, porque tampoco reciben gas doméstico», resaltó. La situación también los mantiene incomunicados, sin servicio de telefonía ni internet.
Señaló que los productores del campo están al borde de la quiebra, y que además enfrentan un problema adicional que es la falta de combustible para trasladar sus alimentos hasta la ciudad de Barquisimeto. «En el municipio Urdaneta, el promedio de tiempo esperando por un cisterna tanto de gasolina como de gasoil son dos meses», resaltó.