Rafael Piña | LA PRENSA de Lara.- Con preocupación se asomó Yoelis Aranguren en la calle 37 con callejón 10 del sector San Juan, al suroeste de Barquisimeto, cuando denunció que desde hace cuatro meses no reciben una gota de agua en el sector debido a la renuncia de un «maniobrero» que abría una llave de paso que les hacía llegar agua por tubería a una escuela y 400 personas que viven en el sector.
Detalla la señora que desde que renunció el «maniobrero» están secos. Acotó que suman 4 meses esperando el líquido que antes recibían los martes, jueves y sábados desde las 6:00 de la mañana hasta las 2:00 de la tarde. «Desde que ese hombre se fue aquí se agudizó la crisis con el agua. Ahora dependemos de tobos, ollas y pipas y de una casa que queda a una cuadra donde podemos recoger agua gracias a una manguera de unos vecinos» acotó la mujer al narrar la calamidad que sufren.
La escuela primaria San Antonio, que tiene una matrícula de 250 niños aproximadamente ha tenido que aplicar un horario de clases de contingencia debido a la falla de este servicio público. «Pedimos al ingeniero que revisen la falla porque no somos camellos», señaló Yoleima Alburge, otra vecina.
Desde el año 2013 la comunidad está luchando con el problema del agua. Esa vez salieron a trancar la calle 38 pero sus denuncias nunca hicieron el efecto que buscaban y hasta la fecha siguen padeciendo de las calamidades.
Los afectados piden a gritos la presencia de Numas Colmenárez presidente de Hidrolara para que repare las fallas en la tubería o coloque a un nuevo «maniobrero» para que abra el agua los días correspondientes.