Víctor A. Rodríguez | LA PRENSA DE LARA.- A partir de hoy y durante una semana el país se paralizará con la disputa de la gran final de la LVBP, en la que los Cardenales de Lara y los Tiburones de La Guaira se estarán enfrentando por primera vez en dicha instancia y buscarán quedarse con la gloria del béisbol venezolano.
En el caso de los litolarenses tienen la presión encima, ya que llevan 38 añ;os sin saber lo que es llamarse campeón y cada añ;o su fanaticada los obliga a acabar con esta mala racha. La presión aumenta, ya que la campañ;a pasada se quedaron a una victoria de acabar con este «maleficio» tras caer en la final ante Leones del Caracas, este añ;o buscarán reivindicarse.
La última vez que Tiburones quedó campeón fue en la campañ;a 1985-1986, en su palmarés poseen siete campeonatos y quieren el octavo este mismo añ;o.
En la otra acera, los «pájaros rojos» están en su sexta final en las últimas ocho temporadas, pero han quedado a deber ya que solamente han obtenido dos títulos y han perdido en tres finales durante la última década, también están obligados a quedarse con el cetro de la pelota criolla.
Cardenales se tituló por última vez en la temporada 2019-2020, cuando superaron a Caribes de Anzoátegui en siete juegos (4-3) de la mano de Luis Ugueto, y en las últimas dos campañ;as se quedaron a un juego de la final.
Henry Blanco fue el mandamás del subtítulo de La Guaira el añ;o pasado, y por segunda campañ;a corrida está en la instancia decisiva, está buscando entrar en los libros de la historia e integrar la larga lista de los mánager campeones de la LVBP, ahora tiene una gran oportunidad.
Al igual que Oswaldo Guillén que quiere convertirse en el primer piloto en presumir de un anillo de Serie Mundial de la MLB y otro en el béisbol venezolano.