María B. Jordán | LA PRENSA DE LARA.- Mientras que un camión cisterna rociaba hipoclorito por toda la 20 y la 21, un hombre con un traje de bioseguridad blanco con un dispensador se encargaba de desinfectar la acera y el frente de los comercios. Con un megáfono funcionarios de la Policía de Lara y la Guardia del Pueblo se encargaban de decirle a las personas que no circularan por las calles y que hicieran el uso correcto del tapabocas, mientras que al mismo tiempo Protección Civil iba desinfectando toda la calle.
Esta rutina se cumplió ayer en una jornada de desinfección que abarcó desde la avenida Vargas con 20 hasta llegar a la 42.
A los comercios priorizados como farmacias y ventas de comida los mandaban a bajar sus santamarías para poder desinfectarles el frente y que no se mojara con hipoclorito la parte interna del local o se pudiera dañar la mercancía.
Los funcionarios en su perifoneo hacían énfasis que el covid-19 no es un juego y que debían cumplir todas las medidas de bioseguridad si visitaban el centro. Además impedían el paso tanto peatonal, como de bicicletas, motos y carros por toda la 20.