Maryerlin Villanueva | LA PRENSA DE LARA.- Un refrigerador y 2 mil 300 vacunas que serían aplicadas al personal del Hospital Central de San Cristóbal fueron desviados hacia otro centro de salud, según denuncia de la gobernadora del estado Táchira, Laidy Gómez.
En este sentido, explicó que el pasado sábado la red de distribución del Ministerio de Salud le informó sobre el envío de las neveras para la conservación de las vacunas, sin embargo, al llegar estos insumos a la región, autoridades del Táchira ordenaron el traslado hacia el Hospital Oncológico.
«Esto nos genera duda que las vacunas sean desviadas para atender a funcionarios de las FAES y a los colectivos armados» expresó la primera mandataria regional.
Para el Hospital central corresponden 2 mil 300 vacunas y 768 para el Hospital del Seguro Social Patrocinio Peñuela.
& ;»Se alega que no se pidieron las vacunas y que por eso están en el Oncológico, situación que es falsa, y por eso estamos juzgando la mala fe y actitud dolosa para controlar políticamente un material biológico que es para inmunizar a nuestros médicos» expresó.
Exigió que los médicos sean vacunados en el Hospital Central y no obligarlos a acudir a un centro que maneja proselitismo político que solo ofende la vocación de servicio de los galenos.
«No vamos a permitir ningún tipo de amedrentamiento con nuestros médicos porque ya se está empezando a generar, por lo que si vienen a meterse con nuestros médicos nos van a encontrar en la calle con el pueblo» apuntó.
«Pónganse al día con los parámetros de la OMS, porque no voy a permitir prioridad a las FAES y colectivos, cuando la prioridad deben ser los médicos y las enfermeras» acotó.
La gobernadora dijo que sí se vacuna al personal de dicho hospital centinela, se puede garantizar mayor atención a quienes acuden a este centro hospitalario, que ha mantenido sus puertas abiertas en los 11 meses de pandemia.
En medio de la conflictividad política reconoció que llegarán las vacunas para la inmunización de los profesionales de la salud, sin embargo, lamentó el control de las vacunas por medio de «maniobras políticas».