La exposición a dietas nutricionales deficientes ha incrementado significativamente la incidencia de comorbilidades metabólicas, como la diabetes en algunos sectores de la sociedad. Médicos señalan que hay un patrón preocupante en casos de personas menores de 45 años que han sido diagnosticados con esta enfermedad.
De acuerdo con lo explicado por especialistas, muchos de los casos que están llegando a consultas son personas jóvenes que trabajan y, por el mismo ritmo de vida, prefieren comprar comida en las calles.
Los famosos combos que «resuelven» que tienen, generalmente, un costo de 1.2 o hasta 3 dólares, son platos que, en su mayoría, están compuestos por alimentos hipercalóricos o que cuentan con una cantidad excesiva de carbohidratos, lo que repercute de forma directa en la salud de las personas.
Aunque no hay cifras oficiales relacionadas con los niveles de morbilidad presentes en el país, la evidencia en las consultas muestra una repetición sistemática de casos que van desde los 16 hasta los 45 años. Según testimonios, al menos de dos o tres pacientes en este rango de edad, son vistos semanalmente en consultorios públicos o privados.
Dietas hipercalóricas y sedentarismo: un riesgo creciente
Roxy Suárez, médico general, con diplomado en salud laboral, explica que este fenómeno obedece a la mala nutrición a la que se expone una parte de la sociedad y al consumo excesivo de bebidas gaseosas.
«Muchas cosas influyen, pero la alimentación es clave. También hemos notado que hay mucho sedentarismo que también ayuda al desarrollo de enfermedades. Otra cosa que preocupa es que las personas tienen muy poco tiempo en los trabajos para comer y eso hace que los alimentos no se digieran de una forma correcta».
La doctora menciona que una de las cosas que pueden hacer las personas para tratar de minimizar los riesgos es balancear su alimentación, empezando por agregar frutas a su dieta. En este sentido, la especialista comenta que agregar una mandarina o un cambur puede ayudar a equilibrar la alimentación.
La doctora también recomienda a las personas hacerse chequeos rutinarios al menos una vez al año, especialmente si se tiene algún antecedente de pacientes con diabetes en la familia.
«La genética también juega un papel fundamental. Si hay antecedentes de diabetes en la familia, lo ideal es que las personas se cuiden mucho más con la alimentación y estén más pendientes de hacer sus chequeos rutinarios», concluye.
Los especialistas consideran que la presencia de enfermedades, como la diabetes en personas jóvenes irá en aumento si no se genera conciencia en la colectividad.
Venezuela en cifras
La Federación Mundial de Obesidad publicó un informe en marzo de 2025 en el que advierte que la mitad de la población adulta en Venezuela tiene sobrepeso, debido a la mala alimentación. De acuerdo con los datos compartidos, 54% de los adultos en el país tiene niveles de masa corporal superiores a lo establecido por organizaciones internacionales.
El informe menciona que en la nación sudamericana una persona ingiere entre 1.000 y 2.500 mililitros de bebida azucarada a la semana. El texto aclara que en Venezuela no se aplican impuestos a este tipo de bebidas, por lo que el costo es relativamente bajo.
Orlando Hernández, médico internista, señala que la indisciplina que tienen algunas personas a la hora de alimentarse hace que sea muy difícil controlar esta enfermedad.
«Hay una tendencia preocupante que nos habla del poco cuidado que tienen las personas a la hora de comer. La gente pareciera entender que estos productos procesados que consumen con tanta frecuencia termina afectando directamente su salud», menciona.