Euseglimar González | LA PRENSA.- Parques de Barquisimeto y Cabudare dejan de ser una opción para los padres por el mal estado en que se encuentran. Zonas con montes, columpios y toboganes deteriorados, inseguridad y poca presencia de niños es como lucen en la actualidad los parques.
Comenzaron las vacaciones escolares, pero los padres tienen pocas opciones para llevar a recrear a sus hijos por el mal estado en que se encuentran los parques y lugares recreativos de la ciudad.
El parque del este es el que le hace falta más atención por parte del Instituto Nacional de Parques (Inparques), el área de juegos no es nada atractivo para los niños porque los columpios no sirven, el tobogán sólo queda la estructura metálica, la rueda giratoria le hace falta tubos que no permite que los pequeños puedan jugar.
Las caminerías están enmontadas, hay cabañas que no tienen techo, más que todo la del área de los juegos para los niños. La poca vigilancia que tiene hace que los deportistas den sólo una vuelta y se vayan, temen a que los roben.
“Es un peligro que los niños se monten en el parque porque se pueden cortar con esos tubos que de paso están oxidados”, apuntó Rosa Duran, quien estaba en el parque junto a sus alumnos de preescolar.
La cancha de baloncesto también se encuentra abandonada, la cesta no tiene los aros y su alrededor tiene monte. Usuarios piden que las autoridades poden la grama para que las áreas puedan ser utilizadas.
El parque se llena de deportistas pero no de niños porque no hay puntos recreativos para ellos.
Los fines de semanas es cuando llega un pelín más de pequeños y es porque llevan pelotas, bicicleta y patines para recrearse. Además que hay
un brinca brinca pero los padres deben cancelar por un tiempo determinado.
Nereili Uzcátegui criticó el estado del parque del este, contó que en vacaciones viaja de Maracaibo para Barquisimeto junto a sus dos hijas para pasar las vacaciones y disfrutar de los espacios que ofrece la ciudad.
Uzcátegui señaló que hace un año no estaba tan deteriorado como lo esta ahora.
“Da lastima en el estado en que se encuentra, las autoridades competentes deberían meterle mano para que vuelva a ser atractivos para todos los padres”, comentó.
En otro punto de Barquisimeto, en el parque Mundo de Los Niños, pese a que los fines de semana reciben más de mil niños por día, las piscinas lucen deterioradas.
Edwin Martínez, gerente del parque destacó que la vida útil de las piscinas ya caducó. El interior de las tres piscinas tienen manchas que a simple vista se pueden observar, al igual que las grietas que están en el borde de ellas.
Martínez detalló que la vida útil de la pintura del piso de las piscinas es de tres años, en el 2012 fue la inauguración del parque, es decir que tienen 4 años sin mantenimiento.
“Una maquina se tiene que encargar de retirar la pintura del piso de las piscinas para luego comenzar a pintarlas de nuevo”, explicó Martínez.
El barco “Mundo Caribe”, se encuentra cerrado por filtraciones causado por el desagüe del aire acondicionado y el piso debe ser reparado. El gerente prometió que luego que termine la temporada de vacaciones van a comenzar con las reparaciones.
“Es chimbo que el barco caribe no este funcionando porque es un atractivo para los niños, deben mejorar las áreas para el mejor disfrute de la familia”, comentó Ana Falcón, mientras disfrutaba del parque Mundo de los Niños.
Para continuar con los estados de los parques, es importante mencionar el parque del oeste, que paso de ser un atractivo a un olvido, pocos son los visitantes que ingresan al sitio, el hampa a espantado a varios visitantes.
“Señora no se meta por ahí, cuidado la violan”, fue lo que escuchó María Rodríguez cuando estaba trotando en el parque. La soledad se presta para cualquier acto de violencia.
“La zona es vulnerable a robos porque no hay policías que resguarden a los visitantes, por eso no llevo a mis hijos a ese parque”, dijo Julio Torres, vecino de la zona.
En Cabudare el parque José Bermúdez conocido como parque “Negrura”, lo utilizan para que los niños jueguen tenis, fútbol y troten, aunque la grama sintética de la cancha de fútbol necesitan un cambio, por lo desgastadas que están. Pocos lo visitan y señalaron que el parque esta abandonado.