EFE | LA PRENSA.- El presidente estadounidense, Barack Obama, condenó hoy la prueba nuclear llevada a cabo por Corea del Norte como «una grave amenaza» a la «seguridad regional y estabilidad internacional».
«Estados Unidos condena el test nuclear del 9 de septiembre en los términos más fuertes posibles como una grave amenaza a la seguridad regional y la paz y estabilidad internacional», indicó Obama en una declaración emitida por la Casa Blanca. Recalcó que Corea del Norte es «el único país» que ha ensayado armas nucleares desde el comienzo de este siglo.
Estados Unidos no acepta, y nunca aceptará, a Corea del Norte como un Estado nuclear», agregó el mandatario, que regresa hoy a Washington.
Obama aseguró que tras conocer la noticia conversó telefónicamente con la presidenta surcoreana Park Geun-Hye y el primer ministro japonés Shinzo Abe.
El presidente estadounidense remarcó que trabajará junto al Consejo de Seguridad y la comunidad internacional para «implementar vigorosamente las medidas existentes» contra Corea del Norte y «tomar significativos pasos adicionales, incluidas nuevas sanciones, para demostrar que hay consecuencias a sus ilegales y peligrosas acciones». Obama reaccionó así a la confirmación de que Corea del Norte realizó su quinta prueba nuclear, coincidiendo con el 68 aniversario de la fundación de ese país, según informó la televisión estatal.
La detonación atómica se llevó a cabo «con éxito» y tuvo lugar en la base de Punggye-ri, en el nordeste del país, el mismo lugar donde Corea del Norte ya detonó explosivos nucleares en 2006, 2009, 2013 y en enero de este año. La anterior prueba nuclear de enero y el lanzamiento un mes después de un cohete con tecnología de misiles balísticos acarrearon a Corea del Norte duras sanciones de la ONU.