Euseglimar González | LA PRENSA.- “¡Ay, me lo quitaron!, yo quiero a mi papá”, gritaba y lloraba desconsolada una joven en las afueras de la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda (Hcamp), hija de Richard Antonio Mendoza Agüero (36), asesinado ayer a las 6:00 de la mañana en Las Veritas de El Cují, en el sector El Nazareno, de dos tiros: uno en la cabeza y el otro en el pómulo.
Tres tipos entraron a la vivienda, al parecer para robarlos. Uno de ellos tenía puesto en la cara un pasamontañas, dos cargaban armas entre esas, un revólver, según relataron los testigos.
Mileidy Mendoza, hija de Richard, contó que su madre se despertó temprano para prepararle el desayuno a su hermanita de 9 años que iba a la escuela, cuando abrió la puerta principal de la vivienda, tres malandrines saltaron la cerca de bloques aún en construcción y se metieron al interior de la casa, le dijeron a la mujer que se quedara quieta, que era un atraco.
Richard estaba durmiendo al momento del asalto, al igual que su hija Mileidy y sobrina, pero la hija menor de 9 años estaba despierta y vio todo, comenzó a llorar desesperada y uno de los malandros la haló por el cabello y le gritaba que se callara.
En medio de los gritos los integrantes de la familia se despertaron, y cuando Richard salió para ver lo que estaba sucediendo, el choro le dio un disparo en el pómulo. Mileidy detalló que ella comenzó a gritar y salió con su prima en busca de ayuda con los vecinos, pero cuando los malandros se dieron cuenta le dieron el segundo disparo a Richard en la cabeza.
Cuando los malandrines vieron que Richard estaba tirado en el piso, salieron corriendo. Las mujeres cargaron a la víctima y lo montaron en su carro para trasladarlo hasta la emergencia del Hcamp.
Todavía no habían salido del sector cuando el carro se les apagó y no les prendió más. Un vecino, al darse cuenta de lo que estaba sucediendo, les prestó ayuda y emprendieron de nuevo el viaje. En el momento que iban pasando por El Jayo, el caucho del vehículo se les espichó.
La desesperación fue grande, comenzamos a gritar y pedir ayuda a los carros que iban pasando, un señor se detuvo y fue quien nos llevo hasta la emergencia”, dijo Mileidy, con voz entrecortada.
Media hora después de haber ingresado a Richard a la emergencia, el personal medico salió a avisarles a los familiares que había fallecido porque perdió mucha sangre.