Cristina Linárez | LA PRENSA.- La llegada sorpresa, pero discreta, de un grupo numeroso de funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) a seis casas de Valle Hondo, genera molestia e incertidumbre en los habitantes del sector, quienes aseguran que todos vestidos de negros, armados y con equipo de investigación, se dispusieron a entrar en las casas sin ninguna orden de allanamiento.
Un señor de avanzada de edad, quien no quiso identificarse por temor, asegura que a las 5:00 de la tarde del pasado domingo le llegaron a su vivienda los funcionarios: “Eran como 60 efectivos, pero a la casa entraron 10, ellos tocaron la puerta muy decentes y entraron sin hacer desastre. En la casa revisaron cada rincón, pero nunca nos dijeron qué estaban buscaban ni porque estaban en la casa”, expresó el señor un poco alterado.
Además comenta que los funcionarios luego de estar dentro de la vivienda sacaron sus instrumentos de investigación, entre estos un equipo infrarrojo, el cual se utiliza para detectar rastros de sangre.
“Yo los dejé que hicieran su trabajo porque no tengo nada que temer”, agregó el señor, quien aseguró que en la casa se encontraba su esposa con sus dos hijos, en ese momento.
El equipo de La Prensa recorrió toda la zona en busca de más testimonios de los vecinos, con esto se conoció que en otra casa esa misma tarde, también entraron los funcionarios de la misma manera, “sin mucho escándalo”. Una de las vecinas, quien no quiso identificarse, aseguró que la dama (también de la tercera edad y dueña de la vivienda allanada), mientras los funcionarios revisaban su casa, les hizo muchas preguntas acerca de la revisión, pero no respondieron.
En otras cuatro casas, vecinos aseguran que en la madrugada entre las 3:00 am y 5:00 am de ese mismo domingo, los funcionarios tocaron las puertas para entrar, pero la gente no salió de la vivienda.
Ante esta situación residentes del sector Valle Hondo viven ahora con temor y temen que donde residen ocurra lo mismo que pasó en la Urbanización Antonio José de Sucre el pasado 26 de abril, cuando funcionarios de la Guardia Nacional (GN) entraron a la residencia a reprimir a los habitantes causando grandes daños.
La gente de la zona se siente en la mira de los funcionarios, desde que uno de los vecinos del sector (Manuel Sosa) murió de un disparo de bala en una de las manifestaciones que se hacía en el distribuidor Valle Hondo, hace una semana, a unos cuantos metros de las viviendas; pero a esto se le anexó que el día del entierro de Sosa fuese linchado y asesinado un presunto “infiltrado”.
Lo que presumen ha generado los recorridos constantes de la GN y allanamientos del Cicpc.