Osman Rojas | LA PRENSA.- La sombra de una suspensión de clases se vuelve a posar sobre la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA). Esta vez no es el presupuesto o el transporte lo que podría paralizar el semestre sino la falta de comedor que hay en la institución.
Jesús Suárez, presidente del centro de estudiantes de la UCLA, explicó que el día de ayer la universidad se quedó sin comedor porque los recursos asignados se terminaron.
El líder estudiantil contó que ellos (la federación de estudiantes) ya enviaron un comunicado al Ministerio de Educación Superior explicando la problemática y advierte que si esto no es solucionado a partir de la próxima semana los estudiantes suspenderán clases.
El comedor es de mucha ayuda, especialmente para los que vienen de afuera y nosotros no estamos dispuestos a perderlo”, comentó. Suárez dijo que una de las opciones que dio la empresa que suministra la comida a la universidad es quitar el postre y la sopa, pero esta opción no es contemplada por los estudiantes.