Evana Materán | La Prensa.- La opción de mandar a confeccionar prendas con costureras para ahorrar dinero, se vuelve imposible. La esperanza se desvanece con los nuevos precios y la falta de variedad que se encuentran en las mercerías.
En años anteriores, los compradores preferían comprar las telas para llevárselas a las costureras y pedir que les hicieran vestidos, blusas o pantalones para estrenar en diciembre, o en fechas especiales, pero en la actualidad el panorama ha cambiado.
Las quejas por los elevados precios en las telas, hilos y botones se escuchan entre murmullos en los pasillos de las tiendas, mientras que los clientes van observando los precios en cada estante.
Las mujeres buscan las telas que sirvan para confeccionar la ropa de sus hijos o blusas para ellas, pero luego de un recorrido por varias tiendas del centro de Barquisimeto terminan decepcionadas.
Se dan cuenta que los precios son superiores a los 30 mil bolívares por metro y que necesitan diferentes tipos de telas para tener prendas variadas.
“Intento comprar telas para mandar a hacer cobijas para mi bebé, pero están muy caras”, expresó Diana Rodríguez, una joven embarazada quien reconoce que en épocas anteriores mandar a hacer una ropa no pegaba tanto en el bolsillo.
En los establecimientos las ventas van en caída. Eduardo Trabuche, tiene una amplia experiencia en la comercialización de telas. Admite que durante los últimos meses el negocio se ha visto afectado por la situación económica y la falta de producción. Coincide en su opinión con otros consultados por La Prensa, y asegura que el dinero apenas alcanza para comprar comida, una prioridad de los venezolanos que deja en segundo plano la adquisición de otros productos.
Añadió que las dificultades con las líneas para el punto de venta y el poco flujo de dinero en las calles también ha influido de forma negativa en el negocio. “A veces no se agarra efectivo en un día”, expresó Trabuche.
Quienes deciden comprar las telas han tenido que dejarlas picadas en las cajas porque se cae el sistema. Añade que todo empeora con los días.