Anaís Mendoza | LA PRENSA.- A Roger Alfredo López Gutiérrez (47), lo mataron de tres disparos. El hombre quedó muerto dentro de una camioneta, dos hampones le dispararon ayer a las 2:00 pm en la entrada de Pavia.
Pedro Parra, conducía su camioneta Ford Bronco de color verde por la vía principal de Pavia, cuando vio a su amigo Roger salir de su farmacia, la cual atiende desde hace más de 20 años.
“Roger me pidió la cola y me dijo que lo llevara para el centro porque iba a hacer unas compras”, relató con tristeza Pedro.
Roger se montó, pero más adelante una mujer también le da el empujón al señor, así que ella se sentó en el medio de los dos, y se fueron conversando.
Cuando Pedro llegó al semáforo que está en la entrada de Pavia, la luz en rojo hizo que se parara, y en ese momento “Pum, pum, pum”, dos tipos que supuestamente iban en una moto, le dispararon a Roger sin razón alguna.
Cuenta Pedro que sintió que el frío recorría todo su cuerpo; sólo le dio chance de colocar la cabeza al volante, no vio nada, mientras que la muchacha comenzó a gritar, cuando vio que Roger se desangraba.
Se bajaron del carro; el comerciante estaba muerto. Los tres impactos de bala que atravesaron el cuello y la cabeza de Roger salieron por el vidrio trasero de la camioneta. El dueño de la farmacia quedó sentado, con la cabeza hacia arriba. Su chemise azul estaba llena de sangre y su mano derecha quedó encima de su abdomen. Pedro dijo que no vio a nadie pues todo fue muy rápido, relataba con nerviosismo cómo es que se salvó de morir.
La familia de Roger llegó para ver qué había pasado. Estaba impresionado el padrastro que su muchacho era un buen hombre, trabajador y muy conocido en Pavia. Estaba triste, dijo que Roger no mereció morir así pues no tenía problemas con nadie.
“Roger era muy popular por ser un hombre caritativo. La delincuencia acaba con la gente buena”, acotó el padrastro.