Alexandra Peña Burgos | LA PRENSA.- Hay marcas, récords y huellas que sólo se alcanzan por los mejores. Leiric Salcedo ya forma parte de las páginas que se han escrito en el voleibol de cancha femenino de Lara. A sus 16 años es una de las tres únicas atletas que en un mismo año jugó campeonatos nacionales en cuatro categorías distintas.
Cuando era de la división mini, jugó en el infantil, juvenil y juvenil A, hazaña que sólo tenían las centrales Gabriela Rodríguez “La Morocha” y Anapaula Castillo.
“Todo se lo debo a la experiencia. Mi entrenador Marco Tulio Gómez me metió a la cancha desde muy chiquita, creo que esa ha sido la clave de mis resultados”, detalló la atacante, quien además tiene en su haber más de 14 títulos nacionales y un reconocimiento entre las jugadoras más destacadas a nivel nacional de la categoría juvenil, aún siendo infantil.
Como jugadora de punta (puesto 4) tiene una gran saltabilidad y una característica que pocas voleibolistas logran, cambiar la dirección del balón estando en el aire.
“A todas se les entrena por igual, pero sólo algunas desarrollan ese potencial”, soltó Marco Tulio Gómez, quien ha sido uno de sus formadores como atleta.
Leiric es una de las puntales del conjunto larense para los Juegos Nacionales Juveniles de este año. Aunque están en la fase de preselección todo apunta que integrará el equipo crepuscular.
Su llegada al voleibol no fue de carambola. Probó cuando tenía 8 años, pero también tuvo una pasada por el ballet, el agua era su mejor amiga y se apuntó en clases de natación. Las artes marciales le llamaron la atención y así estuvo hasta los 11 años, cuando se decidió por el deporte de la malla alta.
“Fui muy intermitente al principio. No me decidía entre la natación y el voleibol, pero a los 11 años empecé a competir y eso me terminó de empujar al voleibol”, detalló Salcedo, quien es la mayor de dos hermanas y sus padres también jugaron voleibol.
La complicidad con su padre viene del mismo deporte. Su papá, Ricardo Salcedo, fue jugador de selección de Lara en juvenil.
“Todo el día hablamos de voleibol. Mi papá me aconseja y siempre ambos me ven en las competencias”, detalló la jugadora que aspira terminar su ciclo como jugadora en su tierra y luego saltar a ligas profesionales en Venezuela o fuera.
Actualmente probó con una franquicia peruana de voleibol de playa. Está a la espera de los resultados.