Esto autorizará a las autoridades de EE.UU. deportar de manera acelerada a aquellas personas que crucen de forma irregular.
Redacción | LA PRENSA DE LARA. – El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tiene previsto firmar una orden ejecutiva este martes que plantea la limitación de las solicitudes de asilo en la frontera con México en caso de que el número de detenciones de migrantes exceda un umbral específico, según informó una fuente legislativa a EFE.
La iniciativa autorizará a las autoridades estadounidenses a deportar de manera acelerada a aquellas personas que crucen de forma irregular, sin brindarles la oportunidad de presentar un caso de asilo, cuando se supere un determinado número de detenciones diarias, aún en proceso de debate.
Medios estadounidenses indican que la medida se implementaría al alcanzar los 4.000 cruces irregulares diarios, aunque este valor aún está en discusión y no se ha llegado a una determinación definitiva. La decisión se presenta a seis meses de las elecciones generales, donde Biden busca la reelección para un segundo mandato.
La gestión de la migración ha cobrado relevancia como tema central para los votantes, superando incluso a la economía y la inflación, según una encuesta de la empresa Gallup publicada a finales de abril.
El expresidente y precandidato republicano a la presidencia, Donald Trump, ha reavivado una retórica antimigrante en su campaña electoral, criticando directamente las políticas de Biden y acusándolo de provocar una «crisis» en la frontera.
La Casa Blanca planea anunciar la propuesta en un evento en compañía de alcaldes de ciudades fronterizas, según fuentes de medios estadounidenses. A pesar de que el año pasado se registraron cifras récord de detenciones en la frontera con México, durante este año dichas cifras han disminuido drásticamente.
En abril pasado, las autoridades estadounidenses reportaron 128.900 detenciones de migrantes que intentaron cruzar de forma irregular a EE. UU., en contraste con casi 250.000 arrestos en diciembre de 2023. Esta reducción se atribuye, tanto por expertos como funcionarios estadounidenses, a las acciones implementadas por México para detener a personas en su trayecto hacia el norte. Sin embargo, migrantes y organizaciones de derechos humanos han denunciado posibles abusos por parte de las autoridades mexicanas, incluyendo extorsiones.
Esta orden ejecutiva no será la primera vez que Biden anuncia medidas para controlar la migración por tierra. En mayo del año pasado, su Gobierno introdujo cambios para considerar «no elegibles» para solicitar asilo a los migrantes que crucen de forma irregular la frontera y no hayan pedido protección en un tercer país durante su ruta hacia EE. UU.
El contexto mundial de un aumento histórico en el número de personas desplazadas en el continente, junto con la presión de la oposición y el ala moderada de su partido, han llevado a la Administración de Biden a alejarse de las promesas de campaña de «restaurar» el sistema de asilo. En lugar de ello, la Administración demócrata ha mantenido políticas restrictivas heredadas del Gobierno anterior, como el denominado Título 42 que permite devoluciones rápidas, posteriormente ampliándolas o modificándolas con nuevas regulaciones con el objetivo de limitar las solicitudes de asilo en la frontera sur.
Bajo las leyes vigentes, una persona tiene el derecho de solicitar asilo en EE. UU. en la frontera o dentro del territorio. A diferencia de otras formas de migración legal, como los visados de trabajo, la legislación no establece un límite anual para la concesión de asilo debido a su naturaleza humanitaria de protección.