María B. Jordán | LA PRENSA DE LARA – Para los estudiantes universitarios este año 2020 estuvo cargado de desafíos. Los consideran como uno de los más difíciles tras la crisis económica que atraviesa el país.
Muchos de ellos tuvieron que abandonar las aulas, pues las becas y la ayudas ya no existen, las providencias poco a poco fueron desapareciendo, como el servicio de comedor, que para los estudiantes foráneos era una salvación.
Simón Urbina, miembro de la Federación de Centros de Estudiantes (FCU) de la UCLA dijo que «fue un año duro, no hubo propuesta ni ninguna ayuda para las universidades», por lo que se ve golpeada y los estudiantes no escapan de ello.
Los insumos para prácticas y talleres durante las clases presenciales de este año también tuvieron que salir del bolsillo de cada uno de los universitarios e incluso de profesores que también colaboran.
Urbina también contó que hubo varios robos en los decanatos, por lo que los dueños de lo ajeno se llevaron computadoras y otros equipos importantes y necesarios para las clases, que a la larga no los pueden recuperar ante la falta de presupuesto.
Los estudiantes dicen que ellos siguen apostando por la educación a pesar de las dificultades y de la pandemia, pues no están viendo todas las materias en la modalidad virtual.
Sin becas ni bonos
Con el pasar del tiempo los beneficios socioeconómicos de los docentes se han venido a pique, tanto así que ahora para otorgar bonos y hasta las becas para los estudiantes, el Gobierno Nacional lo hace a través de la plataforma Patria.
Los docentes comentan que años atrás ellos gozaban de beneficios económicos con los que ellos podían vivir dignamente, pero hoy eso quedó en el olvido, pues los bonos por vacaciones o aguinaldos ya no valen nada. Por ejemplo, antes podían comprar hasta carros y vestir a toda su familia, hoy si compran unos cuantos víveres es mucho.
Blanca Terán, presidenta de Aproupel, dijo que no están en contra de esos beneficios, pero que si deben ser cancelados para todos «porque es por el sistema Patria y no en la nómina».
En el caso de las becas estudiantiles también sucede lo mismo mientras que antes hacían un estudio y verifican las condiciones de cada uno para otorgar el beneficio, hoy lo hacen a través del sistema Patria, pero el moto es de Bs. 320.000, que no llega ni siquiera a 50 centavos de dólar, pues ni una hoja pueden comprar.