Rafael Piña | LA PRENSA de Lara.- «No sabemos lo que es bañarnos con agua de la regadera«, señaló Milagros Rodríguez, quien denuncia un inmenso bote de agua en la carrera 1 con calles 12 y 13 de Barrio Unión. Desde hace dos meses tiene la comunidad sufriendo, no solo por el río que se forma, si no que a las casas no llega el agua por falta de presión.
No es la primera vez que se daña la tubería matriz en el sector, hace ocho meses se reventó el tubo y por iniciativa de la comunidad decidieron reventar el asfalto y tras varias denuncias a Hidrolara, en marzo arreglaron la falla pero al parecer los trabajos no fueron eficaces y esta vez el problema es mayor.
Desde finales del mes de julio, el asfalto comenzó a botar agua y desde allí se ha formado una piscina. Luz Aranguren, vive al frente de la «piscina» como fue bautizado por la comunidad el bote de agua y todos los días llena su tobo, para solventar la ausencia por la poca presión con la que llega el agua los días martes, jueves, sábados y domingos. «Me ha tocado ir a Hidrolara a colocar el reporte y ellos me dicen que no tienen recursos«, dijo la afectada.
500 familias aproximadamente se ven afectadas por la deficiencia del agua y a eso le añaden los constantes cortes de luz que han dañado varias bombas de agua en el sector la cual ayudaban a surtir los tanques. En las noches durante el racionamiento eléctrico han ocurrido varios accidentes de motos ya que no ven la magnitud del hueco que ha sido producido por la «regadera» de agua. «He visto como gente mayor ha caído en el hueco», dijo con preocupación Pedro Vargas.
La comunidad, al no tener el apoyo del consejo comunal de la zona, le piden el apoyo a la gobernadora Carmen Meléndez para que les solucionen el problema o hable con el presidente de la hidrológica Numas Colmenárez para que de inmediato repare la falla de la tubería matriz.