Daimar Díaz | LA PRENSA de Lara.- Al menos cuatro fundaciones de Barquisimeto están afectadas por la falta de gas doméstico y han recurrido a la alternativa de cocinar con leña para alimentar a quienes cuidan o alimentan. Tener las bombonas vacías los obliga a no preparar la cantidad de platos con alimentos que dan a diario.
En el comedor de la Ciudad de Los Muchachos, diariamente sirven comida para 2 mil personas; sin embargo, cuando no cuentan con el servicio solo pueden ofrecer alimentos a 80 personas que pertenecen a la fundación. «Hacemos de tripas corazón para poder ayudar a todos los que se acercan, pero lamentablemente cuando no hay gas solo podemos darle de comer a los miembros de la fundación», expresó Greiser Vargas, una de las cocineras del lugar.
En la Movida Positiva, organización que reparte alimento a las personas en la calle, han tomado como opción pedir mediante las redes sociales la colaboración de algún hogar que pueda facilitar cocinas o estufas para poder seguir cumpliendo con su labor, pero en ocasiones no aparece esta mano amiga. Ellos con gas hacen 300 arepas cada fin de semana, pero con leña no llegan a ese objetivo.
«Tengo un reverbero que solía usar para cocinar la comida que se reparte en las calles, pero por la falta de gas he tenido que pedir cocinas prestadas, pero la rapidez no es la misma, ahora tardo más para poder hacer la misma cantidad de alimentos o por lo menos la mitad», aseveró Jenifer Peña, directora de esta fundación.
Otra fundación que sufre la escasez del servicio es la Casa Hogar Fandes, su coordinadora Angélica Yokaomende asegura que gracias a la bondad de los larenses tienen suficiente comida para los pequeños que albergan, pero no cuentan con gas para poder cocinarla. «Fui varias veces al llenadero a solicitar la distribución del servicio, me dijeron que éramos prioridad, pero nunca me llamaron ni trajeron el gas».
Otra de las fundaciones consultadas fue Cáritas, quienes también sufren los embates de la crisis. En su comedor realizado los domingos solían ofrecer alimentos al menos para 500 personas, ahora por la falta de gas y tener que usar el recurso de la leña solo pueden ayudar a 300 familias. «Buscamos leña en las casas de quienes vienen al comedor, pero ya no podemos alimentar a la misma cantidad», aseveró Rosa Acosta.