Víctor A. Rodríguez | LA PRENSA DE LARA.- Carlos Rivero e Ildemaro Vargas vivieron su noche de ensueño al lograr par de marcas personales, pero la fiesta fue dañada por Águilas del Zulia que se impuso 4-3 ante los Cardenales de Lara en el estadio Antonio Herrera Gutiérrez y en un encuentro en el que ambos conjuntos solamente cumplen con el calendario.
El primer turno de «El Tsunami», disparó su séptimo doble de la temporada con un elevadito que cayó delante del jardinero derecho, el batazo representó el imparable número 500 en su carrera en la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP). Es el pelotero activo número 11 que llega a la cifra del medio millar de incogibles.
Cardenales ganaba 1-0 pero llegó la lesión de Raúl Rivero que tuvo que salir del juego en el cuarto capítulo. El Zulia aprovechó la situación y fabricó 2 en el cuarto y 2 en el octavo para sentenciar el partido.
Le pone la cereza al pastel
Ildemaro Vargas ha tenido una temporada de ensueño y durante la jornada de ayer le colocó la cereza al pastel con su hit en el octavo inning.
Con el encuentro abajo 4-1, el de Caripito, estado Monagas, encontró a José Tábata en la tercera almohadilla y dos outs en la pizarra, y ante los envíos de Danny Rondón, dejó caer el bate dejando salir un hit hacia la banda contraria para remolcar la segunda del equipo.
Pero no fue una carrera impulsada cualquiera sino que representó la remolcada número 40, y se convirtió en el único primer bate y segunda base que logra llegar a dicha marca en la historia de la LVBP. Superó a Mike Goliat como el segunda base con más empujadas en una temporada, según el periodista Ignacio Serrano.
A esto se le suman los récords que logró en esta misma zafra que fueron superar a Teolindo Acosta como el criollo con más encuentros seguidos sonando imparables (27) y quedando a solo uno de Adrián Garret quien logró 28 juegos.