José D. Sequera | LA PRENSA de Lara.- La cancha del sector Piedras Blancas de Pueblo Nuevo era el lugar predilecto que tenía Luis José Peña Pacheco (25), alias «Gato» para cazar a las mujeres y menores de edad que planeaba abusar sexualmente, y justamente fue el mismo sitio donde cayó abatido ayer en un enfrentamiento a tiros contra funcionarios adscritos a la Delegación Municipal San Juan del Cicpc.
De acuerdo a una fuente policial, la «petejota» estaba tras la pista de «Gato» por encontrarse solicitado por, supuestamente, cometer un abuso sexual agravado ocurrido el 26 de febrero del año pasado.
Además, estaba siendo investigado por otros cuatro abusos sexuales contra mujeres y menores de edad desde noviembre del 2018 hasta el pasado sábado.
Por eso, ayer a eso de las 3:30 de la tarde, los vecinos de la cancha, ubicada en la calle 22 entre carreras 3 y 4 de Pueblo Nuevo, vieron que una comisión de varias camionetas del Cicpc rodearon la cancha, lugar en el que estaba «Gato», quien unos minutos antes había recibido la visita de su esposa para llevarle el almuerzo y se retiró inmediatamente.
Los funcionarios entraron hasta la cancha y se dirigieron hasta un pequeño cuarto que está ahí dentro. Se identificaron como Cicpc. «Gato», desenfundó un arma y abrió fuego contra ellos, quienes para repeler la acción también dispararon.
En el enfrentamiento, uno de los tiros alcanzó el pecho del hombre, cayendo malherido al suelo. Los vecinos de Piedras Blancas vieron cómo los funcionarios llevaron el cuerpo ensangrentado hasta una de sus unidades para trasladarlo al Seguro Social Pastor Oropeza.
«El chamo estaba empapado en sangre. Era tanta, que un rastro largo de color rojo quedó en el suelo de la cancha y del callejón en donde estaba la camioneta», comentó una vecina que vive en la misma cuadra de la cancha. Después del ingreso de «Gato» al centro de salud, se confirmó su muerte.
Hasta la cancha, llegó una comisión del Eje de Homicidios de la policía científica para realizar la inspección técnica. Allí lograron colectar como evidencias dos pistolas, una calibre 25 mm y otra calibre 9 mm, así como cinco conchas de bala 9 mm.
Al mismo tiempo, vecinos de la zona salieron de sus casas para ver el movimiento policial. Entre ellos, comentaban que «Gato» tenía mala fama en Piedras Blancas, lugar que había escogido para pernoctar, pues su familia, supuestamente, lo había botado de su casa en Ruiz Pineda por mala conducta.
«Sólo recibía la visita de su esposa y de su hija. Ella todos los mediodía llegaba hasta la cancha a pie desde Ruiz Pineda para llevarle almuerzo», afirmó un vecino.