Carlos Herrera | LA PRENSA.- El señor Gerónimo de Jesús Piedra Terán (55) trabajaba como herrero. Mientras tomaba las medidas de una pantalla metálica con su metro una fuerte brisa pasó e hizo que tocara un cable de alta tensión. “Pummm” se escuchó en ese instante y el herrero cayó desde aproximadamente 10 metros de altura, quedando al instante sin signos vitales.
Junto a Gerónimo estaba su compañero “El Gordo” en el edificio Chytomanía, ubicado en la esquina de la 41 con avenida Venezuela. “El Gordo” bajó “volando” y muy nervioso a ver si podía auxiliar a su compañero, pero ya era demasiado tarde.
A las 5:20 de la tarde, la víctima cayó bocabajo contra el pavimento, quedando tendido a las afueras de un laboratorio clínico bacteriológico, ubicado en la planta baja del edificio.