E.González/J.Orozco | LA PRENSA.- Jugaba con sus primitos y en un descuido tropezó y cayó a una ponchera con agua. Un niño de 1 año y 9 meses murió la tarde del miércoles en su casa en Las Veritas de Tamaca, al norte de Barquisimeto. Aunque su madre hizo todo lo posible para salvarlo no lo logró.
Una tía contó que el pequeñín estaba jugando con unos primitos más grandes que él, ellos estaban solamente con la mamá del niño. Detallan que los gritos del niño dejaron de escucharse y la madre se alertó y salió a buscarlo.
Cuando salió al patio no vio al niño jugando, pero sí lo vio dentro de una ponchera, supuestamente la madre corrió desesperada a agarrarlo, lo cargó y gritaba. Los niños pensaron que el bebé estaba jugando con el agua.
Cuentan que al niño lo acostaron en una cama tratando de que reaccionara, pero ya era tarde, el pequeño había muerto. Funcionarios del Cicpc llegaron hasta la vivienda para hacer el levantamiento del cuerpo y lo trasladaron hasta la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda. La familia estaba devastada por la pérdida.