Héctor Rodríguez | LA PRENSA.- Precisar el arma de fuego que se usó para causarle la gran herida en el cuello a Nelson Daniel Arévalo Avendaño es el gran reto que tiene la Unidad Criminalística y la Fiscalía Sexta del Ministerio Público para determinar de dónde salió el proyectil y quién lo disparó.
Tras la entrega el sábado en la noche del cadáver del chamo que era miembro de la “resistencia” en Las Trinitarias, se logró saber que en la certificación médica del acta de defunción un “traumatismo raquimedular cervical severo causado por disparo de arma de fuego” fue lo que le causó “blasting pulmonar”, es decir, el proyectil generó daño a la médula espinal y pudo abarcar, simultáneamente, las meninges, vasos sanguíneos y tejido nervioso hasta el punto que le provocó una posible embolia pulmonar.
También se conoció que la onda expansiva del impacto causó una lesión considerable a “Dominic el ídolo” como lo conocían.
En ese documento que le entregaron en la morgue del hospital a los familiares de Nelson para su posterior entierro, no se precisa el tipo de arma que le causó esa herida que tenía un diámetro de unos 4 centímetros. El equipo periodístico de este medio logró precisar a través de diferentes fuentes, que las autoridades determinaron que el orificio del lado izquierdo fue el de entrada y el que está por la parte derecha casi cerca de la nuca es el de salida.
También se supo que en el hombro, parte del pecho y cachete izquierdo le pudieron colectar “pólvora no deflagrada”, en otras palabras, pólvora que no se quemó al momento de que el arma de fuego se disparó.
Tras la consulta que se le realizó a expertos criminalísticos sobre las heridas y evidencias colectadas en el cuerpo, podrían ser dos armas las que dejen este tipo de características; una de ella es la escopeta y la otra es un mortero.
Por las características del cañón de la escopeta y su tiro, que es un “cono de dispersión”, se sospecha que una arma de este tipo pudo ser la usada en la muerte de Nelson, pero también se maneja que la causante del orificio podría ser un mortero, pues la herida tiene rastros muy irregulares.
Los investigadores también están cotejando distancia, tipo de munición y sobre todo trayectoria del disparo para completar el juego de evidencias que llevarían a dar conclusión en este sonado caso que ha conmovido al estado Lara.