José Daniel Sequera | LA PRENSA.- Un intento de robo con una pistola de juguete fue la causa para que un presunto delincuente fuera brutalmente golpeado. El lío fue ayer en la tarde en la carrera 3 con calle 7 de Barrio Unión y tuvo como resultado el hampón herido, una casa afectada por una colisión vehicular y mucha furia en las personas.
El casi linchado quedó identificado como Jhon Cristian Sánchez Linares (28) alias “Oquita”, quien sometió a Yoel Camacho, chofer de un rapidito y los pasajeros que allí iban.
De acuerdo al testimonio de Camacho, él había salido a trabajar ayer en el carro de un cuñado “para poder agarrar una platica” y cuando iba por La Antena, “Oquita” se montó en el rapidito.
“Él se montó y parecía un pasajero común y corriente. Iba él y una señora en la parte de atrás. Cuando rodaba por la cinco de Barrio Unión, sacó un arma de su pantalón y nos comenzó a amenazar”, recordó el rapiditero.
Cuenta el hombre que hubo un momento donde el delincuente la agarró contra la señora y que aprovechó ese instante para quitarle el arma.
“Vi la oportunidad, así que quité las manos del volante para tratar de agarrar el arma. Pero en eso me estrellé contra la casa”, precisó con voz temblorosa el conductor.
Con el impacto, la media pared y la reja de la casa afectada quedaron totalmente destruidos, además que en el sitio quedó un hombre que fue golpeado.
Justo después del choque, el choro salió corriendo por la calle, pero unas personas que presenciaron el hecho lo agarraron a unos pocos metros, lo amarraron y pretendían lincharlo.
En plena exaltación de la gente le agarraron el arma y al observarla se dieron cuenta que era de mentira, lo que hizo caldear los ánimos, pero de entre la multitud salió una mujer que se identificó que era de religión cristiana e impidió que violentasen al hombre.
A los minutos llegaron los efectivos de Polilara y Policía Nacional, quienes detuvieron al delincuente y lo pusieron bajo custodia en la camioneta, a la vez que el señor que había sido lesionado por el rapidito fue llevado de urgencia al Hospital Pastor Oropeza.
En el sitio del accidente, personas de la comunidad se apostaron alrededor del camión de Polilara para evitar que liberaran al detenido.
En minutos, llegaron unos supuestos familiares del choro que estaban pidiendo clemencia por Jhon. “No le hagan nada por favor. No lo maten”, pedían.
También se pudo conocer que la otra señora que venía en el rapidito la habían sacado a un centro asistencial por un infarto; sin embargo, La Prensa no pudo confirmar esta información.
Ayer se pudo conocer a través de redes sociales, que en la Chucho Briceño de Cabudare, la comunidad también agarró a un ladrón, pero a este lo desnudaron y lo amarraron en un poste de luz.