martes, 25 febrero 2025
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Padre del decapitado informa que cayó por robo

Anaís Mendoza | LA PRENSA.-  Joven decapitado termi­nó preso por robo. El me­nor de 17 años, a quien otros reos de celda del Centro Socioeducativo Pablo Herrera Campins decapitaron el miércoles, terminó privado de liber­tad por robarse un celular hace 6 meses.

Con rostro de conster­nación y muy triste, Os­waldo Flores, padre de la víctima dijo que estaba impactado por la muerte de su muchacho. El se­ñor viajó desde Carora, municipio Torres con parte de la familia para retirar el cuerpo del ma­yor de sus tres hijos.

Contó que su hijo en enero de este año robó a una persona quitándole el celular en el sector Mé­rida lugar donde residen. El joven fue detenido el mismo día del robo por funcionarios del Cicpc, pero horas más tarde fue dejado en libertad, pero con la condición de no salir de su casa porque estaba siendo investigado.

Sin embargo 15 días después el menor salió a las calles y fue detenido nuevamente por el Cicpc y lo encerraron en el re­tén de El Manzano.

El padre destacó que se enteraron de la muerte del joven a través de una llamada, pero jamás pen­saron que lo habían ma­tado de esa manera. “Me llamaron para dar­me la noticia de que lo habían matado, se me hacía muy difícil visitar­lo. Era fuerte llevarle la comida y sobre todo para la casa (de la familia) por­que no se consigue. Yo casi no lo veía porque era complicado; los pasajes son muy caros”, comentó el señor mientras soste­nía las ganas de llorar.

Culpables

Familiares de los de­más presos expresaron que el culpable es el di­rector del penal, Willy Mastrángello, que man­dó al joven al sector “D” para que le cortara el ca­bello a los demás reclusos porque al parecer es ley dejarlos rapados, y que también le pondrán uniforme.

Como a los chamos no les gusta la idea, decidie­ron cortarle la cabeza al joven con una tijera. Lue­go envolvieron el cuerpo en un sábana y jugaron fútbol con la cabeza del chamo.

Familiares denuncia­ron a La Prensa que los detenidos no quieren al director porque no les permite el ingreso de dulces y a veces los ali­mentos son negados pa­ra ingresar.

Hasta los momentos ninguna autoridad se ha manifestado sobre el cri­men ni para hablar sobre las denuncias de los fa­miliares de presos.

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