Anaís Mendoza | LA PRENSA.- “Yo escuché los gritos de La Niña, pero pensé que estaba peleando con la mamá, jamás imaginé que la estaban matando”, expresó bajo anonimato una vecina de Mirlibeth Anaís Rivero Reverol (20), quien fue desmembrada con un machete dentro de su rancho el 30 de diciembre a las 11:00 de la noche.
Este crimen causó conmoción por la forma en que la asesinaron. Cuatro hombres se metieron a su rancho en el sector 5 del barrio Renacer Crepuscular, la violaron y luego la cortaron con un machete y la decapitaron, pero su cabeza no ha sido hallada. Su hermana de 14 años, quien estaba en el rancho, también fue abusada sexualmente, pero se salvó del asesinato.
La Prensa acudió ayer en la mañana a la comunidad, pero los vecinos se encuentran aterrados y conmocionados por el crimen. “Nos enteramos por La Prensa cómo fue que la mataron, porque nosotros no escuchamos nada”, comentaron dos muchachas”.
Pero una vecina de Mirlibeth desde dentro de su residencia explicó que escuchó los gritos de “La Niña”, pero indicó que no se preocupó porque ella se la pasaba peleando con la mamá y era costumbre escuchar peleas en el rancho.
La señora de piel morena no quiso salir de su casa, y desde la puerta explicó que Mirlibeth como vecina era una muchacha tranquila, jamás la vio teniendo problemas con nadie y por eso no se preocupó mientras escuchaba los gritos la noche del crimen. Describió que la bulla sólo duró unos segundos después todo quedó en calma.
Muchos residentes de ese lugar se la pasan dentro de sus casas, casi no están en las calles porque es muy peligroso. Los residentes consultados no salen del asombro del homicidio, muchos se ponen hasta nerviosos cuando hablan de la muerte de Mirlibeth.
Una joven dijo que la vio el viernes en la mañana caminando hacia su casa, junto a su hijo y su hermana de 14 años. “Casi no la trataba porque ella hablaba poco con las personas”, dijo. Los detectives del Cicpc, aún no encuentran la cabeza de Mirlibeth, y su cuerpo sigue aún en la morgue del Hospital.