Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.- Randy José Flores Giménez, de 30 años, salió de la casa de la suegra con destino a su casa, pero nunca llegó. Su familia lo encontró en la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda con un disparo en el pecho y una etiqueta que decía que había muerto por resistencia a la autoridad.
La familia de Randy relató que el viernes a las 12:00 de la tarde salió de la casa de su suegra, en la calle 12 con avenida Ribereña con destino a la suya en el barrio 23 de Enero, desde ese momento desapareció, no supieron más nada de él y aunque lo llamaron no contestó. Seis horas antes de la desaparición, el joven junto a su cuñado fue fotografiado, presuntamente, por funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) durante un operativo policial en el barrio 23 de Enero.
El viernes 19 de febrero vecinos del sector se despertaron sobresaltados por los ladridos de los perros y mucha bulla en la calle, eran las 6:15 de la mañana, al asomarse vieron como hombres con capuchas negras y uniformados con distintivos de las FAES estaban desplegados por la calle 1 B del sector.
Supuestamente buscaban a un chamo que se había escapado y estaba trepando las paredes de las demás viviendas, los funcionarios se metieron casa por casa, aproximadamente a unas 20 y entre esas estaba la casa de la familia Flores Giménez.
«Ellos (FAES) tocaron la puerta y yo les abrí, les dije que pasaran porque no tenía nada que esconder. Se metieron y revisaron cuarto por cuarto, donde estaba durmiendo mi hijo con su esposa y en otro cuarto su cuñado», comentó Gisela Giménez, madre de Randy.
La señora junto a las demás personas que se encontraban ese día recuerdan que los uniformados revisaron toda la vivienda, pero en ese momento Randy les dijo que él tenía una boleta de excarcelación y que estaba en Barquisimeto porque le tocaba presentarse ante Tribunales larenses, como lo hacía mensualmente.
«Cuando ellos estaban a punto de irse, uno de los funcionario que cargaba capucha, le dijo al otro que le tomara una foto a Randy y a su cuñado y luego se fueron sin decir más nada», aseguró otro familiar del muchacho.
La familia no se explica como es que Randy no fue detenido en ese momento, pero seis horas después, supuestamente, si se lo llevaron y todo ocurrió cuando iba de regreso a su casa. Otra de las interrogantes que tienen es que cómo es que se «enfrentó» en Macuto si él no iba para allá.
«Él tenía miedo por esa foto, pero no nos preocupó porque mi mamá es hipertensa. Él llevó a su esposa para la casa de su suegra y tenía pensado irse a Caracas donde trabajaba y fue en ese momento en que las FAES se lo llevó», comentó el familiar.
La familia no supo más nada de Randy y fue casi al caer la noche que llamaron a un contacto del Hospital y preguntaron si al centro de salud había ingresado un hombre herido y al dar el nombre del muchacho recibieron la mala noticia.