Euseglimar González | LA PRENSA.– Un feto, de aproximadamente 16 semanas, fue hallado ayer en la mañana por una vecina que lavaba su casa en la vía principal de La Alfarería en Cabudare. Las cloacas en la casa están colapsadas y decidió limpiarlas para destaparlas, pero su sorpresa fue cuando vio un cuerpecito humano.
Cuenta la mujer que a las 9:00 de la mañana, luego de que escampó decidió salir al patio de su casa para limpiar la cañería y cuando abrió la tapa en el agua estaba flotando el feto.
“Al principio pensé que se trataba de una rata, pero en ese momento el agua lo volteó y pude ver que se trataba de un bebé. Grité desesperada y busqué ayuda”, dijo la propietaria de la vivienda.
La dama salió en busca de los vecinos y volvieron a la escena, el feto estaba de un lado, tenía el cordón umbilical y la placenta a un lado. El tamaño es de unos 12 centímetros.
Los curiosos revisaron el cuerpecito y constataron que era un niño. Presumen que el bebé haya sido expulsado y lanzado a un inodoro.
Funcionarios de la GNB que iban pasando por el sector fueron notificados sobre el hallazgo y ellos llegaron hasta el sitio para verificar los hechos. Luego llamaron a los funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc para que se encargaran del levantamiento del cuerpecito.
Minutos después llegaron los funcionarios del Cicpc. Los detectives interrogaron a los propietarios y luego hicieron el levantamiento del cuerpecito para investigaciones. El feto fue trasladado hasta la morgue del Hospital Central para que se realicen las averiguaciones correspondientes al hecho.
La propietaria explicó que en la zona hay colapso de cloacas y que por eso ella estaba limpiando, pues cuando el agua se empoza es más fuerte el olor fétido.
Impresionados
Los vecinos estaban impactados por el hallazgo y no salían de su asombro. Comentaban entre ellos que la “madre” era una asesina por abortar.
“Aquí deberían hacerle a todas las mujeres de la comunidad una citología para saber quién fue la desalmada que le quitó la vida a esa criatura”, comentaba una señora mientras estaba sentada frente a la casa.
Las mujeres aseguraron no conocer a nadie que haya estado embarazada por la comunidad. Pedían a los funcionarios del Cicpc que investigaran ese caso, pues muy pocos son esclarecidos.
“Yo creo que quien abortó no es de esta zona. Por aquí todos nos conocemos”, dijo una muchacha.