Euseglimar González | LA PRENSA de Lara.- Parapléjico quedó un privado de libertad del Centro Penitenciario David Viloria, mejor conocido como Uribana, luego de que, supuestamente, recibiera una paliza dentro del penal. Aunque el miedo que dejan los funcionarios impregnados en cada barrote de celda o pasillo de la cárcel con los maltratos un grupo de detenidos denunció las consecuencias que sufren.
«Si los presos hablan, los golpean para callarlos, silenciarlos y hasta matarlos como ya ha pasado» así de fría fue la reseña que hizo llegar a LA PRENSA un privado de libertad cuando reflejaba la impresionante cantidad de violaciones de derechos humanos que cometen los funcionarios militares y del Ministerio de Servicios Penitenciarios.& ;
En una carta con fotografías que hicieron llegar a este medio indican que hace 24 días dos presos fueron trasladados hasta el Hospital Central, aparentemente, luego de caerse de una litera. Freddy Rafael Fernández era uno de los reclusos y según la información que tenían los familiares es que él se desmayó por hambre.& ;
Este hombre de 54 años cayó de una litera y tres días después murió en el Hospital producto de la caída, pero esta información fue desmentida por los presos, quienes aseguraron que los responsables serían unos funcionarios.
«Al preso que este frito (término con el que definen al reo que reta a los custodios) y no se le quede callado o no pagan para que no sean llevados al área de castigo le dan su paliza. Son como 15 hombres dándole batazos y eso ocurrió hace pocos días con dos reclusos, pero ellos no hablan porque les da miedo», es parte de la denuncia escrita.& ;
LA PRENSA recibió unas fotos donde se puede ver al recluso que sufrió una lesión en la columna y que le afectó la movilidad de su tronco, las piernas y los órganos pélvicos. Detallaron las fuentes internas del Hospital que durante los 24 días que ha estado en el área de Neurocirugía, no ha podido ser trasladado para que le practiquen una resonancia, pues el valor es de Bs. 2 millones 300 mil y contaron que su madre no tiene para pagarla.
Al no realizarle la resonancia los médicos no pueden diagnosticar si tiene una fractura o el problema es con un nervio, pues detallaron que el joven aún tiene reflejos en las piernas, pero no se puede sentar, siempre debe estar acostado.
La fuente detalló que el recluso lo único que pide es que le den su libertad para poder irse a Caracas, su ciudad natal y donde se encontraría con su madre. La mamá del detenido sólo lo ha podido visitar una vez, pues no tiene dinero ni dónde hospedarse.
«En el penal todo lo disfrazan, todo lo esconden. La ministra Iris Varela no sabe nada porque ella no se la pasa en el recinto. Allá nadie está al pendiente de los reclusos, nadie vela por su bienestar ni los derechos humanos», comentó una fuente.
Vuelve al penal
Se pudo conocer que el privado de libertad fue trasladado al penal, luego. Al parecer, unos funcionarios del Ministerio le informó que debía ser llevado de nuevo, pues revisarían su expediente por el operativo que hacen del Plan Cayapa, puede que le otorguen la libertad. «Él solo pide eso, que le den la libertad. Aquí no tiene a nadie, toda su familia está en Caracas», soltó la fuente del Hospital.& ;