Cumplió con amenaza y lo mató de una puñalada

Euseglimar González | LA PRENSA de Lara.-& ;Luis Alberto Rivas Mogollón, de 42 años, supuestamente fue amenazado de muerte por un tipo y este luego de un mes lo vio y sin mediar palabras le clavó un cuchillo carnicero, en el corazón, que lo dejó agonizando por nueve días y ayer en la madrugada falleció.& ;

El 18 de octubre Luis estaba cerca de su casa en el sector I de La Carucieña, al oeste de Barquisimeto, cuando se encontró con el tipo, que lo había amenazado, aparentemente el hombre llegó acompañado por otro tipo y se puso frente a Luis y en ese momento sacó un cuchillo y se lo clavó en el pecho, dejándolo malherido en la acera.

«Ese hombre lo amenazó que donde lo viera lo iba a apuñalar y lo hizo», comentó en medio de la tristeza un familiar de Luis, quien estaba ayer en los alrededores de la morgue del Hospital Central.

La familia detalló que el día en el que Luis fue apuñalado fue trasladado hasta el Hospital Central, esa madrugada lo intervinieron quirúrgicamente para parar la hemorragia, pues la herida era muy profunda, pero no reaccionó, aseguraron que durante los nueve días estuvo inconsciente.

Aunque los familiares no quisieron aportar mayores detalles sobre el hombre que atacó y mató a Luis, se pudo conocer que el victimario, aparentemente lo conocía a él y a su esposa. Los familiares contaron que cuatro días después de que Luis resultara herido, ellos denunciaron ante el Cicpc para que le pusieran los ganchos a los dos hombres implicados en el caso y el martes los funcionarios lograron aprehenderlos.& ;

Durante la mañana de ayer los funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc llegaron a la morgue para conocer más detalles sobre el caso y comenzar con las investigaciones, debido a que ya hay dos personas detenidas por el hecho. Se conoció que los uniformados se dirigieron hasta el sitio del suceso para interrogar a posibles testigos del crimen.& ;

Allegados a la víctima no se explican porqué lo mataron, pues aseguraron que él no se metía con nadie y lo único que hacía era trabajar para mantener a su familia. Luis era vigilante de un banco del centro de la ciudad, además deja a tres hijas huérfanas, dos de ellas menores de edad.