El hecho dejó un muerto y dos heridos este 24 de diciembre El hecho dejó un muerto y dos heridos este 24 de diciembre Guiomar López | LA PRENSA DE LARA.- La madrugada del 24 de diciembre fue violenta para los vecinos del sector Guacabra, en Veragacha. Estaba el cuerpo de Jesús Antonio Aranguren Torrealba con siete puñ;aladas, muy cerca del túnel de la comunidad y los heridos Armando Suárez (63) y Robinson Suárez (27) en la casa cercana, donde presuntamente ocurrió un intento de robo. Las investigaciones continúan para dar con el sujeto prófugo y el arma blanca.
Una de las versiones que cobra más fuerza es la denuncia de la familia Suárez, al explicar durante el ingreso de los heridos a la Emergencia del Hospital Central Antonio María Pineda, que a las 2:40 A.M. fueron sorprendidos por dos sujetos gritando y señ;alando que se trataba de un procedimiento policial. Los presuntos ladrones serían la víctima fatal de 23 añ;os y el prófugo.
Los residentes no creían que se trataba de funcionarios policiales y ante la negativa de abrir la puerta, los sujetos bajan la brequera. Aprovechan la oscuridad y uno de ellos abre la puerta a golpes. El más violento cargaba un arma de fuego y el sexagenario empieza a forcejear, siendo herido con un disparo en la pantorrilla. Mientras su hijo se defiende de Aranguren, quien presuntamente era desafiante con un cuchillo y resulta herido en la región intercostal izquierda y en la cara, quedando hospitalizado en el principal centro asistencial.
Ese día del hecho, los funcionarios del Cicpc estuvieron varias horas en la búsqueda de evidencias. La casa rosada de la familia Suárez tenía rastros de sangre en la sala y en el patio de tierra. Además, que a lo interno del túnel habían otros restos de sangre, desconociendo si se trataba durante el intento de fuga de los presuntos implicados. A pocos metros, en un angosto camino que dirige hacia la avenida Circunvalación fue encontrado el cuerpo de Aranguren y no ubicaban el arma blanca.
Pleito viejo
La versión de Jéssica Suárez, esposa de la víctima, es que su esposo el viernes trabajó y luego se quedó tomando bebidas alcohólicas con sus compañ;eros de trabajo. La última vez que lo vio fue a las 11:00 pm que fue a comer y le preparó una arepa. Ella le comentó que no tardara por ahí y se acuesta. Se levanta a las 2:00 am y no había regresado. Al rato escucha muchos gritos en la calle porque viven cerca de la casa de los Suárez y recorre hasta más allá del túnel sin conseguirlo.
Luego casi amaneciendo vuelve a buscarlo, con la esperanza de que hubiese estado dormido y borracho en la calle. Un pálpito la llevó a ese caminito, donde estaba muerto. Ella tiene todas las sospechas sobre Armando Suárez, señ;alando que tenían problemas tan graves que el sexagenario la tumbó teniendo 7 meses de embarazo y casi pierde a su niñ;a. Lo denunció y los amenazó «que eso no terminaría así». Piensa que se trató de algo personal por el viejo problema.