G.G/Mario Sosa | LA PRENSA.- En la urbanización Francisco Torres están de luto. El domingo 11 de septiembre en la madrugada, fue asesinado de un disparo un residente que gozaba del aprecio de todos.
Se trataba de Alcides Ramón Gil Caripá, de 31 años, quien desde el sábado estaba celebrando por ser el padrino en un bautizo, cuya reunión entre familiares y amistades se realizó en el sector San Vicente de Carora, municipio Torres.
Cuando la celebración concluyó, Alcides Ramón había salido a un sitio a comprar cigarrillos. Al llegar al establecimiento comercial en el que también expenden bebidas alcohólicas, cuatro hombres llegaron de repente con la intención de robar.
El error de Alcides Ramón fue reconocer a uno de los tipos y decirle: ¿Qué pasó pana? ¿Por qué vas a robar si somos del barrio? ¡Somos los mismos!.
Esa expresión enfureció a uno de ellos, quien aparentemente bajo los efectos de las drogas sacó su arma y le metió un balazo en el pecho, quitándole la vida de forma instantánea.
Los delincuentes huyeron. El fallecido quedó tendido en calle 4 vereda 41. Vecinos de la zona salieron minutos después a ver qué había pasado. Cuando confirmaron que era Alcides Ramón, empezaron a comunicarse por teléfono con sus familiares.
Parientes de la víctima al llegar al sitio se lanzaron sobre él a abrazarlo entre lágrimas. Media hora después del hecho, funcionarios de la Subdelegación Carora del Cicpc llegaron a efectuar su trabajo.