Anaís Mendoza | LA PRENSA.- Hipótesis de ataque de celos cobra más fuerza que la de esquizofrenia. Fuentes ligadas a la investigación del caso aseguran que Hernán Javier Yuconsa de 45 años, quien asesinó de varias puñaladas a su esposa y que también intentó matar a su hija, no sufrió un ataque de esquizofrenia sino que estaba bien cuerdo cuando le clavaba el cuchillo a su pareja.
Aunque Hernán intentó escapar tras cometer el crimen, fue detenido por hombres del Cicpc de la subdelegación Carora. Como se dio a conocer en La Prensa ayer, Hernán agredió a su esposa Yaira Carolina Meléndez (37) con un cuchillo, cuando estaban en un finca familiar el domingo en el sector Pueblo Aparte, del municipio Torres.
También del caso se logró precisar que sólo esperan por un chequeo médico ordenado por la Fiscalía que lleva la investigación para determinar si Hernán sufría algún cuadro psiquiátrico y si estaba bajo tratamiento. Se precisó que no sólo el hombre está detenido sino que la prima, la mamá y la madrina de Hernán también lo están preventivamente por colaborar con el hombre en la huida, pues ellas montaron al asesino en la camioneta Hyundai Tucson e intentaron escapar por la carretera Centroccidental donde fueron precisados. Hernán y Yaira vivían en Barquisimeto.
La pareja estaba en la finca de la familia de Hernán, disfrutando las vacaciones de los días de Semana Santa. La pareja armó las maletas en la sala, mientras que la hija de ellos, de cinco años, estaba en uno de los cuartos de la casa. “Denme un cuchillo”, dijo de la nada Hernán pero su prima, que los acompañaba, le contestó que no tenía.
Como el hombre no recibió respuesta acerca del cuchillo, buscó en cada lugar de la hacienda hasta que lo halló.
Se desconoce en qué parte de la vivienda lo encontró, pero luego de tomarlo, se dirigió hacia la sala donde estaba Yaira. Cuando la mujer sintió la presencia de su esposo, se volteó y en ese instante recibió la puñalada en la parte izquierda del pecho y luego en el hombro.
La hermana de Yaira se percató del ataque y corrió a auxiliarla, pero el hombre forcejeó unos segundos con ella, hasta que la soltó. Luego, Hernán se fue hasta la habitación donde estaba su hija y también la apuñaló dos veces.