Euseglimar González | LA PRENSA de Lara.- Henyer Villanueva (42) agonizó durante tres horas luego de ser arrollado por una camioneta en Las Veritas, al norte de Barquisimeto. El hombre sufría de esquizofrenia y era sordomudo.
Henyer no estaba bajo tratamiento porque hace, aproximadamente, dos años no tomaba anticonvulsivos debido a la escasez que hay en el país. Su hermana contó que debido a eso, Henyer se la pasaba caminando por las calles, cerca de su casa.
El miércoles a las 10:00 de la mañana, como todos los días, Henyer salió de su casa e iba caminando y cuando atravesaba la calle, justo en la entrada de Las Veritas, un carro «fantasma» se lo llevó por delante. El hombre cayó a pocos metros sobre el asfalto y el conductor se dio a la fuga.
Henyer recibió el golpe en la cadera, tuvo fractura de fémur y brazo, además presentó politraumatismo craneoencefálico. Duró alrededor de media hora tirado sobre el pavimento. Un vecino de la zona lo montó en su camioneta y lo trasladó hasta la Emergencia del Hospital Central Antonio María Pineda.
Dos horas después de lo sucedido, los familiares de Henyer se enteraron sobre lo ocurrido y llegaron al hospital. Contaron que Henyer estaba intubado y le pidieron realizarle unas placas, pero aseguraron que pese a que estaba intubado no tenía oxígeno, aparentemente, un médico les dijo que no había.
«Dos horas estuvo él en el hospital y ni las placas le habían realizado, aun cuando eso lo harían ahí mismo», comentó una de las hermanas de Henyer.
Henyer murió el miércoles en la tarde, tras tres horas de agonía por las complicaciones que presentó, según comentaron los familiares.
Allegados a la familia de Henyer, presumen que el vehículo que lo arrolló tiene que ser grande, como una camioneta, pues el golpe que recibió fue en la cadera y explicaron que si fuese un carro pequeño lo golpea es en la pierna.
Vecinos de la zona aseguraron no haber visto nada y que salieron cuando escucharon los gritos de otras personas que vieron a Henyer en el pavimento.
«Me vine de Colombia y le traía sus medicamentos, entre esos la clonazepam, pero cuando llegué ayer (miércoles) en la noche me dijeron que mi hermano estaba muerto», dijo con tristeza una hermana de Henyer.
Los familiares con tristeza aseguraron que su caso será uno más del «montón», pues quien lo arrolló no pagará, pues detallaron que mayormente los culpables no son atrapados por los cuerpos de seguridad.