Euseglimar González | LA PRENSA.- A sangre fría mataba. Reidi Alexis Álvarez Vargas (25), alias el “Reidi” se convirtió en el más buscado de Lara por los funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc, pues en sus expedientes figuraba en al menos 16 homicidios. La tarde del viernes, en Pozo Azul, parte baja de El Cercado lo “pescaron” y el tipo se cayó a tiros.
El “Reidi” era el líder de su propia banda, tenía alrededor de 15 personas trabajando para él. Tenía una plaza de droga en Barrio Unión. Fue fichado por los “petejotas” desde 2015, pero el viernes a las 4:30 de la tarde dieron con él en una de sus “conchas”.
Al sitio llegaron más de 30 funcionarios del Eje de Homicidios apoyados con la Brigada de Acciones Especiales (BAE) y se desplegaron por todo el sector, es una zona boscosa. El “Reidi”, supuestamente, estaba junto a su “guardaespaldas”, apodado el “Pollo”, quien también era el tercero al mando de la banda delictiva.
Los “petejotas” llegaron hasta el último rancho del sector y entromparon, pero apenas el “Pollo” se dio cuenta que estaban allí comenzó a disparar contra la comisión, supuestamente, para dar chance de que el “Reidi” huyera.
El primero en caer malherido fue Anderson José Pineda Mendoza (27), apodado el “Pollo”, mientras que los otros funcionarios se fueron detrás del “Reidi” para detenerlo, pero el tipo se metió a una zona enmontada y seguía disparando.
El tipo corrió unos 200 metros y se metió al patio de una casa y desde allí entrompó a los funcionarios. Tiros iban y venían, mientras que el hampón se resistía a morirse, pero segundos después cayó.
Como una película de acción describieron los vecinos el entrompe del Cicpc. Cuando escucharon la plomazón se tiraron al suelo y no salieron de sus casas. Detallan que escuchaban cuando las balas pegaban contra las paredes de las casas.
Escuchaban los pasos de personas corriendo, más voces por todos lados. Además de las ráfagas de tiros.
“Eso fue más de 50 tiros. Ese tipo corrió bastante y le disparó muchas veces a los “petejotas”, comentó una vecina de la zona.
Aunque a los dos hombres los trasladaron hasta el ambulatorio fueron ingresados sin signos vitales. En ambos sitios los “petejotas” colectaron un revólver calibre 38; una pistola plateada calibre 7.65 y varias conchas percutidas.
El tipo tenía alrededor de un año en el sector y vivía en un rancho de lata, supuestamente, con una mujer, pero poco lo veían en la zona, iba esporádicamente.
Se salvó una vez
El miércoles al mediodía, el “Reidi” se cayó a tiros con unos policías y tras una persecución el tipo se les escapó cuando se estrelló contra una casa en El Garabatal. Funcionarios le seguían los pasos hasta que el viernes dos días después de su huida cayó abatido.
Vecinos del sector comentaron que el miércoles lo vieron pasar con una moto negra con naranja y un botellón de agua. En el rancho siempre había hombres, presuntamente, armados.
Camionetas y motos nuevas pasaban a toda hora por el sector. Habitantes de la zona agradecieron al Cicpc por “acabar con ese choro”.