Rafael Piña | LA PRENSA de Lara.- Venezuela está de jubilo luego de que la dupla de hermanos Rubén y Jesús Limardo disputaron la final del esgrima en la modalidad del florete, donde el medallista olímpico derrotó a su hermano menor con el resultado de 15-8 para así sumar la tercera presea dorada para el país en la justa deportiva y haciendo algo sin precedentes en la historia de los Juegos Panamericanos.
Rubén Limardo, quien llegó lesionado al evento continental con dolencias en su codo y en la mano izquierda, con la que maneja la espada, logró sobrepasar esos obstáculos para coronarse por tercera ocasión, segunda de forma consecutiva en la cita americana para así sumar su cuarta medalla dorada en los Panamericanos y además se convirtieron en la primera pareja de hermanos que protagonizan una final en la esgrima panamericana.
En el campeonato panamericano de esgrima realizado en Canadá ambos hermanos disputaron la final y el resultado fue el mismo donde se impuso Rubén Limardo. Lo importante es que el menor de los hermanos sumó su primera medalla y la delegación venezolana repunta para grandes logros en Tokio.