LA PRENSA DE LARA.- Hace apenas 15 días las autoridades policiales publicaron en los medios de comunicación en amplia difusión la detención de dos jóvenes en El Tocuyo, estado Lara, por haber agredido un gato al arrojarlo a un canal que desemboca en un colector profundo de aguas negras, lo cual merece una sanción en aplicación de la ley de protección de los animales domésticos.& ;
Pero la ley debe entrar por casa. En el mes de mayo fue publicado un video promoviendo la construcción de una pista de karting en el Parque Zoológico Bararida, al frente del cual aparece nada más y nada menos que el flamante gobernador Adolfo Pereira, quien anda pretendiendo ser actor y filmando cuanta idea nefasta se le ocurre para subirla en las redes sociales como figura de primera línea. Va a la represa Dos cerritos y pretende hacer creer que está inaugurando esta obra puesta en servicio en 1.972. Allí mismo en la represa quiso hacer aparecer como una obra de su gobierno la pista de canotaje que fue construida en 1.998. Y ahora esto de la construcción de una pista de karting en el parque zoológico Bararida, contraviniendo todos los instrumentos legales nacionales e internacionales de protección a la biodiversidad de especies y al ecosistema que constituye ese espacio natural en Barquisimeto.
Lo que hemos dicho lo mantenemos y lo denunciamos. En esa trama de aparente contribución al esparcimiento hay un negocio redondo que por un lado estaba agrediendo a los ciudadanos y a la ciudad y por otro se está fomentando una trama de corrupción con un consorcio que lo han encargado de construir y administrar el peaje el cardenalito y que viene desde cuando era gobernadora Carmen Meléndez y que ha sido proseguido por Adolfo Pereira, consiguiendo un nuevo mecanismo de obtener ganancias ilícitas a través del gobierno ya que construir una pista de karting es oneroso y su mantenimiento es costoso. Pero aquí no iban a tener problema: tienen nueva cerca perimetral para protegerse; vigilancia de día y de noche; trabajadores para el mantenimiento de las áreas de la pista; acceso de público cautivo y estacionamiento vehicular; y lo que iban a poner eran los vehículos aun cuando hubiese que destruir las diversas especies animales y la flora y fauna que allí existe. Los bolsillos se iban a llenar de dinero sucio pero eso no importa. Ahora el régimen está tratando de borrar las huellas de todo este entramado de corrupción para evitar que el delito cometido no exista y proteger en vez de castigar al famoso gobernante. A los muchachos si los castigaron por el daño infligido al gato. A Adolfito hay que protegerlo.& ; & ; & ;
Por: Guillermo Palacios.
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