Agencias | LA PRENSA DE LARA.- Con las derrotas de Nalek Korbaj e Irismar Cardozo, Venezuela se quedó el domingo sin dos de sus tres representantes en el boxeo de los Juegos de Tokio, un deporte que suele estar entre sus mejores opciones de medalla.
El único púgil del equipo venezolano que sigue en liza es Yoel Finol (52kg), medallista de plata en Río-2016 y gran esperanza del país para subir al podio del boxeo.
En su debut olímpico, Nalek Korbaj cayó ante el argelino Mohammed Houmri por un ajustado 3-2 en la ronda preliminar del peso medio pesado (75-81 kg).
«Quedé en deuda con el país. Pido disculpas a todos mis seguidores», dijo a la AFP Korbaj en la zona mixta de la arena Kokugikan.
Apodado el «Rocky de Venezuela» por haberse criado en Filadelfia, ciudad del boxeador más famoso del cine, Korbaj acarició la victoria frente a un rival que le superaba notablemente en altura y potencia.
Gracias a su superioridad técnica, el boxeador de Mérida conectó los golpes más claros y llegó a verse vencedor del combate ante un rival que constantemente trató de parar el combate.
«Estuvimos dominando el primero (asalto), parecía que íbamos ganando. En el segundo ya me sentía ganador pero recibí unos golpecitos leves que me marcaron y fue lo que le favoreció a él para ganar», lamentó.
«Trabajé con todos los golpes de potencia, fino, pero al final lo deciden los jueces», dijo con resignación.
Houmri, que será el primer rival del cubano Arlen López, oro en Río-2016, buscó con descaro que corriera el tiempo abrazando continuamente a Korbaj en el segundo y tercer asalto.
«Él no quería más», señaló el venezolano.
A sus 25 años, Korbaj no piensa en una nueva experiencia olímpica en París-2024 y buscará abrirse camino en el boxeo profesional en Estados Unidos, donde vivió durante una década.
«Mi ciclo amateur lo voy a dejar aquí, voy a dedicarme al plano profesional», afirmó. «Tengo unos promotores en Estados Unidos y vamos a ver cómo va. Pero voy a olvidarme del amateur».
Otro venezolano en equipo de refugiados
En la mañana del domingo, Irismar Cardozo abrió la participación venezolana en boxeo con una derrota por decisión unánime ante la italiana Giordana Sorrentino.
Cardozo, que logró el tercer lugar en los Juegos Panamericanos de Lima-2019, fue superada ampliamente por el boxeo agresivo y calculador de Sorrentino en la primera ronda del peso mosca (48-51 kg) de Tokio.
Los cinco jueces coincidieron en decretar el triunfo de Sorrentino, de 21 años, novena clasificada en el pasado Mundial de 2019.
El boxeo es uno de los deportes olímpicos más representativos de Venezuela y el que le dio su primer oro de la mano de Francisco ‘Morochito’ Rodríguez en México-1968.
Siguieron su estela en el ring Pedro Gamarro, Bernardo Piñango y Finol, con platas en Montreal-1976, Moscú-1980 y Rio-2016; y Marcelino Bolívar y Omar Catarí, con bronces en Los Ángeles-1984.
La última esperanza en Tokio-2020 será Yoel Finol, flamante medallista de plata cinco años atrás, que debutará el lunes ante el japonés Ryomei Tanaka.
«Nos queda un solo boxeador y hay que esperar que salga victorioso y logre el objetivo de la medalla», animó Korbaj.
Otro venezolano, Eldric Sella, subirá al ring de Tokio pero representando al equipo de refugiados.
El caraqueño se estrenará el lunes frente al dominicano Euri Cedeno en la categoría de peso mediano (69-75 kg).
A la decepción de Venezuela en el boxeo se sumó el domingo la eliminación de Rubén Limardo, medallista de oro en esgrima en Londres-2012, en el primer combate de sus cuartos Juegos Olímpicos.
AFP