Ágatha Reyes | LA PRENSA.- El pueblo no puede aguantar seis años más de crisis. Maduro perdió la capacidad de gobernar al no poder suplir las necesidades básicas del pueblo que padece por la falta de alimentos. Quienes están en el poder sólo recurren al clientelismo y el control social para seguir gobernando como oligarcas.
Lo suelta el politólogo Radamés Graterol, quien explica que las políticas públicas que han intentado implementar desde el gobierno no han sido precisamente para resolver los problemas principales del país lo que, a su juicio, se traduce en “ineficacia política”.
Detalla que aunque Nicolás Maduro busca la reelección a través de unas elecciones descritas como una “farsa”, la presión internacional y nacional lo llevarán a generar un acuerdo de salida del poder al aceptar que no cuenta con la capacidad para seguir gobernando el país.
“Han tenido la mayoría de las alcaldías, gobernaciones, y diputados. Ahora cuentan con la ANC sin límites de poder y aún así las decisiones que toman están alejadas de los graves problemas del país”.
El también docente en Gobierno y Desarrollo Local, precisa que ocho de cada 10 venezolanos no respaldan la propuesta del actual gobierno. Sin embargo, mientras la dirigencia opositora no logre la unión que reclaman las calles ese número no se verá reflejado en resultados electorales y menos con candidatos que, a su juicio, no representan a la oposición y que no muestran una propuesta de solución a la crisis.
¿Puede el empresariado y el ciudadano aguantar los constantes aumentos de precios y la crisis generalizada?
No hay forma de que el pueblo aguante esta crisis. Las encuestas de condiciones de vida indican que la mayoría de los venezolanos han perdido entre 10 y 11 kilos de peso corporal. Lo único que aumenta es la desnutrición infantil al igual que la deserción escolar, aun cuando el ministro la desmiente. Sólo un 5 % de la población recibe beneficios, mientras que el 95 % restante sufre los embates de la crisis económica.
¿Perdió Maduro la capacidad de asumir las riendas del país?
Sí. Si Maduro hubiese mantenido la capacidad de abastecer de productos básicos al país, en este momento la gente tendría otra percepción, pero ni siquiera el abastecimiento de alimentos fundamentales ha podido garantizar.
¿Juega el gobierno con la miseria y hambre del pueblo?
Sí. Eso es un mecanismo de control social. En la medida que menos acceso tenga a los productos básicos y se mantenga un salario nominal distinto al salario real, en esa medida el ciudadano no tendrá más opción que estar dependiente del Estado, volviéndolos víctimas del control social. Es decir, el clientelismo.
Pero el oficialismo está seguro que Maduro seguirá en el poder después del 20 de mayo
No se debe apostar por alguien que no ha podido atender el país, aún teniendo todo el poder político y económico. Este gobierno logró tener un barril de petróleo por encima de los 100 dólares y no fue capaz de invertir de manera estratégica para solventar los problemas. Han tenido la mayoría de las alcaldías, gobernaciones, diputados, concejales y ahora cuentan con la ANC sin límites de poder y aún así las decisiones que toman están alejadas de los graves problemas del país.
Chávez decía oligarcas temblad ¿hay oligarquía en Venezuela?
Sin duda. La oligarquía significa “gobierno en grupo” y en el país seguimos gobernados por un grupito que lamentablemente no ha entendido cuál es el clamor de la sociedad.
¿El Gobierno utiliza esta crisis para atornillarse en el poder?
Puede ser que la utilice. Pero la oposición no ha tenido la suficiente madurez política para mantener la coalición en la unidad necesaria y contrarrestar la estrategia del gobierno. Todos saben que la estrategia de quienes están al mando del país es desunir a la oposición, pero lamentablemente la reacción del liderazgo opositor nacional no ha podido hacer percibir al electorado el tener esa unión.
¿Con los niveles de crisis, está el país en una especie de olla de presión que puede llegar a niveles de mayor peligrosidad?
Sí. Las políticas públicas que han intentado implementar por parte del gobierno no han sido precisamente para resolver los problemas principales del país, lo que se traduce en ineficacia política.
El gobierno no da respuestas a problemas fundamentales y eso nos lleva a una dependencia exagerada de las importaciones de una economía distinta a la nuestra. No tenemos producción nacional, hay dependencia de la monoproducción petrolera, y en ese vaivén de los precios del petróleo no hay cómo dar respuestas a lo que la gente desea.
¿Si hay gente pasando hambre, muriendo por falta de medicinas y familias que se están desintegrando, por qué el país no reacciona?
Este tipo de acciones necesita ejemplos que nos contagien. Me refiero a liderazgos que se atrevan de manera decidida a reaccionar ante la crisis y la presión gubernamental. Sin un liderazgo las acciones no se consolidan. Además, las amenazas, el uso de la coacción y la fuerza han frenado la acción del ciudadano.
¿Qué impide que la gente materialice la furia por la terrible situación en el país?
La falta de liderazgo y eso es algo que la oposición debe evaluar. La falta de la verdadera unión en la dirigencia ha frenado el accionar del pueblo. Hay que saber manejar las diferencias y percibirse de forma consensuada, la gente no va a salir tan fácil si no percibe una cabeza de líderes fundamentales dando la cara, independientemente de que existan problemas serios de hambre.