Osman Rojas| LA PRENSA.-La crisis económica y social que hay en Venezuela supera el amor que una madre puede llegar a sentir por su hijo.
La aseveración corresponde a Jaime Callado, sociólogo y exprofesor de la Universidad Nacional Experimental Antonio José de Sucre (Unexpo), quien considera que, por no poder mantener a un niño, algunas madres optan por regalar o vender (como sucedió con unas gemelas el pasado miércoles 06 de junio) a sus pequeños.
“Es muy triste lo que pasa en el país pero hay muchas madres que buscan deshacerse de sus hijos porque no los pueden criar. En las barriadas del estado uno encuentra a gente sufriendo, gente que no quiere eso para sus hijos”, comenta. El especialista refiere que, desde hace un par de años, para ciertas familias traer un hijo al mundo no es una alegría sino más bien una carga
“Son muchas cosas las que influyen. Los padres deben pensar que el refrán que dice donde comen dos comen tres ya no es aplicable. Cuidar y educar a un bebé es una inversión que requiere mucho dinero”, suelta.Callado explica que el fenómeno antinatural de regalar o vender a un niños es propio de los países que están sumidos en crisis y considera que no hay mala intención por parte de los padres.
“Uno veía que estas cosas pasaban en las novelas cuando la criada le daba el bebé a los jefes para que lo cuidara. Ahora pasa eso en la sociedad venezolana. Estamos en medio de una crisis que trastoca nuestra conducta”, dice.Marcos Bello, representante de la Sociedad Defensora de los Derechos Humanos en el estado Lara comparte la opinión de Callado y lamenta la circunstancias sociales en la que están naciendo los niños en Venezuela.
“El Estado ni siquiera puede garantizarle a los niños el derecho a la alimentación. Eso es algo deprimente”. Lo que más preocupa a Bello son las decisiones desesperadas que algunos padres pudiesen tomar en la entidad y es que, según cuenta el activista, los abortos también aumentaran. “Si no lo puedes tener vas a querer que no esté”, suelta.