EFE | LA PRENSA.- La taiwanesa HTC, que pasa por una seria crisis en el sector de teléfonos móviles, presentó hoy sus nuevos modelos de la serie U, con un nuevo programa y tecnología de inteligencia artificial.
La estrella de la presentación fue el HTC U Ultra, de altísima gama, que se convierte en el teléfono insignia de la empresa taiwanesa, que busca llenar el hueco del Samsung Note 7 y superarlo, y que va acompañado de un modelo más barato, el HTC U Play.
El HTC U Ultra, construido en cristal y aluminio, viene con Qualcomm Snapdragon 835, pantalla de 6 pulgadas con resolución QHD (1440 x 2560 píxeles), cámara trasera dual de 24+13 megapíxeles y delantera de 16 megapíxeles, batería de 4.000 mAh y sensor de huellas, según fuentes cercanas a la empresa.
El HTC U Play es un modelo «más compacto», según el presidente de la división de smartphones de la compañía, Chialin Chang, con pantalla de 5,2 pulgadas y resolución FHD (1080 x 1920 píxeles), procesador MediaTek Helio P10 y cámara de 16 megapíxeles.
El programa HTC Sense Companion ayuda a los teléfonos HTC a aprender para adaptarse mejor a las necesidades del usuario y la tecnología U Sonic adapta el sonido al usuario, agregó Chang en la presentación.
HTC registró en 2016 una baja interanual en ventas del 35 por ciento y cayó el nivel más bajo en los últimos 12 años, según un comunicado de la empresa del 6 de enero, en el que reportó ventas consolidadas de 78.160 millones de dólares taiwaneses (2.440 millones de dólares) para el año.
La empresa taiwanesa, que fue una de las pioneras en la telefonía móvil, ha sufrido los embates de la competencia, por un lado, del iPhone de Apple y de los teléfonos de Samsung, y por el otro, de los teléfonos chinos, tales como Huawei y Xiaomi, que ya no sólo atraen por el precio sino también por las prestaciones.