Transcurrida la cincuentena pascual, que consiste en 50 días luego del Domingo de Resurrección, la Iglesia católica celebra la fiesta del Pentecostés que inicia con la vigilia al Espíritu Santo la noche antes del domingo y que se convierte en la segunda actividad más importante del catolicismo, luego de la solemne vigilia pascual.
En diversos templos de la Arquidiócesis de Barquisimeto, fieles vivirán esta celebración que simboliza también el nacimiento de la Iglesia católica. Según el padre Eduardo Angulo, párroco de la iglesia San Jacinto y asesor de la hermandad de Emaús de la iglesia Barquisimetana, explicó que a nivel litúrgico rememora los primeros siglos del cristianismo, en los que basados en la promesa de Jesús luego de su ida al cielo, iba a enviarles «al consolador».
«Después de la resurrección los discípulos aguardaban la promesa del Señor, el Pentecostés se convirtió en un mandato bíblico que a nivel teológico significa un antes y después para la naciente religión, por lo que esta celebración, a pesar de tener diversos significados, el principal es el asentamiento de la iglesia», resaltó el padre Angulo.


Pentecostés se celebra este domingo 8 de junio
En referencia a los ritos que se llevan a cabo durante la vigilia, el religioso agregó que resaltan el canto de cuatro salmos, acompañados de cuatro lecturas, incluyendo la epístola de San Pablo, para recordar a los fieles que el Espíritu Santo es quien lleva las riendas de la Iglesia. Además, en esta vigilia de mañana sábado se permite la administración del sacramento del bautismo.
Según las rúbricas del misal romano, la vigilia debe realizarse generalmente en una hora pasada las cuatro de la tarde en la que por medio de oraciones y actos litúrgicos, como la exposición del santísimo sacramento, los fieles se congregan como las primeras comunidades cristianas para recibir el Espíritu de Dios, culminando a la medianoche con la santa eucaristía. Por fallas de condiciones de movilidad y seguridad en Barquisimeto, se llevarán a cabo hasta máximo las 10:00 de la noche.
El padre Alexander Nieves, párroco de la iglesia San José, destacó que la solemnidad de Pentecostés enfatiza en la iglesia y en los fieles la presencia de Dios uno y trino, motor de la vida de la Iglesia.


«Según el magisterio de la Iglesia, el Espíritu Santo se convierte en el guía y consolador de todos, el que ayuda al buen discernimiento, a tomar decisiones correctas, que ayuda a la sanación cada vez que se pasa por momentos de enfermedad. Hay que recordar que también en este día, en la iglesia, se resaltan los siete dones y los 12 frutos de la tercera persona de la santísima trinidad», puntualizó Nieves.
En Pentecostés, Venezuela celebra a los seminarios
La Conferencia Episcopal Venezolana ha instaurado desde 1928 la celebración del Día del Seminario en la fecha de Pentecostés, que entre las actividades establecidas se sugiere al pueblo orar por los seminaristas y formadores, para que permanezcan fieles a la llamada que Dios les ha hecho.


El padre Nieves, en referencia a este tema, sostuvo que se hace prudente pedir al Espíritu la gracia necesaria para que sigan existiendo hombres que deseen una consagración total al Señor, por lo que dentro de las actividades de la vigilia se establece un lapso de tiempo para pedir por aquellos que están cursando estudios para el orden sacerdotal.
Cantos, rezos, oraciones y misas marcarán la pauta de este sábado, 7 de junio, en los templos en los que los fieles también pedirán por los frutos de este año de la esperanza y el pontificado de León XIV. En la iglesia, este también es el día de la Renovación Carismática Católica, movimiento que reaviva la fe del pueblo de Dios con ayuda del Espíritu Santo.