Jesús Oviedo | La PRENSA.- Los embates de la crisis económica han afectado la dinámica de las familias venezolanas. Las personas en los hogares antes podían comprar artefactos electrodomésticos nuevos o de segunda mano.
Las nuevas familias o aquellas que crecían equipaban toda la casa o renovaban una parte de esta. Ahora, dado los altos costos adquirir cualquier tipo de aparato es más complejo.
Miguel Alejos relató que desde hace seis meses quiere comprar una licuadora usada porque la que tiene ha presentado fallas en reiteradas ocasiones pese a las reparaciones que le ha mandado hacer.
Cada vez que tengo la plata para comprar una licuadora voy al local pero me dicen que aumentó. La situación está muy difícil, estamos exprimiendo los corotos que tenemos en la casa”, narró Alejos con tristeza.
El señor Miguel Chediak es dueño de un local en la carrera 23 donde venden artefactos usados, en este se encuentran desde licuadoras, lavadoras, televisores y hasta enfriadores. Para adquirir estos objetos de segunda mano se deben disponer de mínimo Bs. 60 mil dado que una cocina de dos hornillas se encuentra desde ese precio pero las neveras sencillas están entre los 100 mil y 150 mil bolívares.
“Las ventas están superlentas” dijo Chediak mientras contó que tiene más de un mes sin vender cocinas o neveras y que los clientes señalan que no les da la base para adquirirlos.
El entrevistado agregó que también vende repuestos usados para todo tipo de equipos del hogar y que salen con más frecuencia. Los objetos que compra Chediak con regularidad tienen fallas, en su negocio los reparan y luego los exhiben para la venta pero acotó que cada vez gasta más en dichos arreglos.
Los costos de los electrodomésticos usados son una opción para los larenses que pueden adquirir en locales comerciales o también por internet, dado que nuevos valen hasta cinco veces más. En una tienda del centro de Barquisimeto se puede comprar una nevera desde Bs. 500 mil. En cambio una lavadora está a partir de los Bs. 400 mil.